«La gente elegirá infelicidad antes que incertidumbre»
—Tim Ferriss
En estos últimos años me he dado cuenta de que mucha gente confunde seguridad con certeza.
Toman decisiones buscando sentirse más seguros, cuando en realidad lo que quieren es una vida predecible, sin incertidumbre.
Por ejemplo, aceptan un empleo en vez de intentar montárselo por su cuenta porque creen que la primera opción les ofrece mayor seguridad, cuando en realidad no es el caso.
En el momento en que empiezas a trabajar para una empresa estás cediendo el control de tus ingresos a un tercero, que tiene la capacidad de despedirte o bajarte el sueldo a su antojo. Además, si el negocio quiebra, tú te quedas automáticamente en la calle.
¿Cómo alguien puede llamar a eso «seguro»?
Lo que sí que aporta un empleo es predictibilidad.
Siendo asalariado sabes exactamente qué días tienes que ir a trabajar, cuándo te van a pagar y qué cantidad. La incertidumbre desaparece y tu inseguridad en ti mismo también, ya que sabes qué va a pasar hoy, mañana, pasado y dentro de un mes en tu vida si mantienes ese trabajo.
Por supuesto, no hay nada de malo en desear una vida predecible, pero conviene llamar a las cosas por su nombre.
¿Qué es entonces la verdadera seguridad?
Para mí, la verdadera seguridad consiste en ser capaz de reaccionar ante cualquier situación, sea cual sea. En volverse antifrágil.
Hay tres activos que van a aportar seguridad a tu vida:
- Dinero. Nada da más tranquilidad que tener cash en el banco, porque sabes que mientras dure siempre tendrás comida, un techo para dormir y podrás comprar todo lo que necesites.
- Habilidades. Cuantas más cosas sepas hacer, mejor podrás enfrentarte a las situaciones que se te presenten. Además, si esas habilidades están demandadas por el mercado, siempre podrás intercambiarlas por dinero.
- Relaciones. Tener a personas de confianza que puedan ayudarte en caso de necesidad y abrirte puertas cuando lo necesites es un seguro de vida que no tiene precio.
Y si te fijas, los tres ofrecen exactamente lo mismo: opciones.
Seguridad = opciones.
Cuantas más opciones tengas a tu disposición en un determinado momento, más seguridad tendrás, y al contrario.
Una buena manera de evaluar tu nivel de seguridad real es preguntarte qué pasaría si de la noche a la mañana perdieses todas tus fuentes de ingresos.
¿Cuánto tiempo podrías mantenerte?
Con lo que sabes, ¿cuánto tiempo tardarías en encontrar o crear nuevas fuentes de ingresos?
¿A quién podrías acudir en busca de ayuda?
Puede que hacerte estas preguntas te haga darte cuenta de que tu vida no es tan segura como parecía, y de que, a pesar de que ahora todo parezca bajo control, estás al borde del desastre en cuanto ocurra el menor imprevisto.
Como dije antes, no veo nada de malo en querer una vida predecible. De hecho, todos necesitamos un cierto grado de certeza en nuestra vida (yo el primero). Sin embargo, sí que creo que la incertidumbre es un componente importante de estar vivo, y querer eliminarla por completo es irrealista y contraproducente.
Para mí, la vida sin incertidumbre es como la pizza sin piña: se puede comer, pero no mola tanto.
Y si la idea de una vida sin piña en las pizzas ya me parece poco agradable (¡piña power!), la vida sin incertidumbre y sabiendo qué voy a hacer cada día me parece todavía peor.
Por eso, hoy tengo dos consejos para ti:
- Recuerda la diferencia entre seguridad y certeza. No es lo mismo.
- Céntrate más en aumentar tu seguridad que en reducir tu incertidumbre, porque una vez que tu nivel de seguridad sea lo suficientemente alto la incertidumbre dejará de importarte.
¡Buena semana!
Fernando dice
Respecto a esto que cuentas sobre seguridad y certeza aunque estoy de acuerdo, yo incluiría otra variable en la ecuación: percepción de la realidad.
Lo digo porque me sorprende enormemente la cantidad de personas que no son conscientes de que viven en la cuerda floja simplemente porque tienen un papelito que pone «contrato de trabajo».
Sin embargo, ellos dentro de su fantasía se sienten seguros e incluso felices.
Si es que no hay nada como la ignorancia para ser feliz.
Saludos,
Alberto dice
El otro día escuché a Derek Sivers responder a la típica pregunta: ¿Que harías si perdieras todo tu dinero, propiedades y contactos y tuvieras que empezar de nuevo con $1000? Su respuesta venía a ser algo así: Sé de marketing y ventas, dos cosas que siempre hacen falta. Me compraría un portatil y seguramente trabajaría de freelance por internet para mantenerme mientras volvía a lo que me gusta hacer.
Está claro, las habilidades te abren opciones y tener opciones da tranquilidad. 🙂
Rocío Olivares dice
Alberto estoy de acuerdo contigo al final se trata de conocerte y entenderte, y saber que se te da mejor, y tener habilidades, una vez tienes eso, creo que cualquier incertidumbre se puede afrontar de mejor manera.
Juan Sánchez González dice
Haces mención a Antifragil. Libro imprescindible de leer.
Un saludo!
Marina dice
A mí me pasó hace un par de meses en mi cocina que «di cuenta» (ya lo sabía, pero me vino la idea a la cabeza con mucha claridad) de que nadie podía despedirme. Que no estaba ganando un montón, ni mi negocio era perfecto, ni tenía la vida resuelta… pero no me podía despedir nadie. Eso me dio mucha tranquilidad 🙂
¡Buen artículo! Abrazos 🙂
Marina dice
¡Por cierto! Yo no estoy de acuerdo en que la cerveza sin alcohol no mole. Mola en el momento en que no beber alcohol sirve a tus prioridades y a tu forma de ver la vida -> (creo que el link es relevante, no es mi intención espamear). Ya sé que es cachondeo, pero me preocupa un poco la predominancia del concepto alcohol como algo guay y de estar perdiéndote algo si no bebes 🙁
Besitos.
Belén dice
I totally agree, Marina!
El alcohol se ha normalizado tanto en nuestra sociedad que parece que tiene que ir unido al concepto de diversión o bienestar. Incluso si hablamos de «una copita de vino al día» o «un par de cervezas» si empezamos a sumar el consumo que eso implica en un mes, un año y en toda tu vida… Son muchos litros de alcohol que han rodado por tu organismo y muchas neuronas que han quedado por el camino.
No se trata de criminalizar, pero tampoco todo lo contrario incitando al consumo…
Luis dice
Hola, espero que caiga como respuesta al comentario de Marina. Solo para meterme un poquito en ese tópico de alcohol, esa promoción del mismo y el alcoholismo social. Pues yo creo que el el pensamiento de ceveza sin alcohol que no mola es válido. Si no quieres beber alcohol, pues no bebas cerveza, (sino algún zumo o cualquier otra bebida)
Pero beber cerveza sin alcohol, café sin cafeína, leche sin lactosa y vida sin incertidumbre pues resultan insípidas.
Nico forno dice
Bien dicho
Sergio dice
Buenas Ángel,
creo que hemos vivido demasiado tiempo creyendo que la vida es un camino certero que conduce, sin sobresalto alguno, al lugar que nos han indicado que tenemos que llegar. Nos han hecho creer que, por un corto período de tiempo (años de bonanza económica), se podía vivir con la absoluta certeza de que al día siguiente no pasaría nada malo; y al final ha acabado pasando.
El resultado que nos encontramos es que ahora la gente está asustada y no sabe actuar ante este componente de la vida que, en realidad, ha estado siempre presente. Puedes ver incluso personas que se enfadan porque se les ha ido al traste ciertos indicadores de certeza que consideraban infalibles, a pesar de que habían sido establecidos por cuenta ajena; ahora tienen que vivir una vida que depende de ellos mismos, y esto requiere, desgraciadamente, un esfuerzo titánico para muchos.
La vida nunca ha sido certera por más que nos empeñemos. Y creo que no es en absoluto negativo, tan sólo hay que comprenderlo que siempre ha sido así.
Así que bajo esa concepción de seguridad que añades, yo sumaría la capacidad de consciencia de la realidad. Una persona puede ser más o menos segura según cómo sea de consciente de la vida que está viviendo, lo cual conduce a una capacidad mayor de reacción ante imprevistos y, en consecuencia, a tomarse la vida como un lugar dónde puede pasar de todo y dónde gran parte de esta incertidumbre depende de sus propias decisiones y acciones como individuo que es dueño de su propia vida.
Rener Frank dice
La verdadera fuerza no está en construirse una vida perfecta en la que nada puede salir mal, sino en saber aceptar la situación, reaccionar con sinceridad y sobreponerse a las dificultades.
La vida no se puede planificar al detalle. No hay riesgos 100% medibles. A pesar de una buena planificación las cosas también pueden torcerse.
No hay un único camino recto, sino que el camino se va trazando poco a poco y que lo que hoy es válido puede mañana no serlo.
El asunto de la predictibilidad es algo que puede resultar necesario para algunos. Hay personas a las que una falta de rutina predecible y estable puede causarles incomodidad e incluso ansiedad. Aunque no comparta ese punto de vista, puedo llegar a entenderlo.
La fórmula Dinero + Habilidades + Relaciones me parece correcta, pero siempre que sea escalable en el tiempo. Me refiero a intentar que esos ingresos, habilidades y relaciones se mantengan y aumenten/evolucionen.
Vivir en modo Kaizen y, aunque estés bien, siempre intentar ir a mejor 🙂
Un abrazo, Mr. Alegre!
Saul dice
Yo siempre he sido una persona que le gustaba tener todo bajo control. Y he sido uno más del «rebaño»; hipoteca (casa con mogollón de cosas inútiles dentro), trabajo fijo (12 años aguantando a personas que hoy no les dedicaría ni un minuto), coche con préstamo (deseando que pase el tiempo para tenerlo pagado) …. Vamos, lo «normal» (es que ahora me descojono) ….
Ahora me dedico a la mejor actividad del mundo que es pura incertidumbre ! … Hago trading (pura especulación en los mercados financieros) … ¿Y porque es la mejor actividad (nunca lo llamaría trabajo) del
Mundo?; con la única persona que te enfrentas todos los días es contra ti mismo. No tienes que intentas vender nada ni captar seguidores. Me hace crecer cada día porque tomo decisiones constantemente, aunque realmente yo pienso que mi actividad no va de tomar decisiones, va de controlar las emociones, ser disciplinado y constante. Puedo hacerlo en cualquier parte del mundo. Solo necesito un poco de dinero, un ordenador y conexión a internet. Me permite gestionar mi tiempo (que es realmente lo más valioso que tenemos) como me dé la gana y puedo disfrutar de lo que más me hace vivir que es viajar !
Erik Martín dice
Nos encanta experimentar esa (falsa) sensación de seguridad. El miedo a la pérdida mueve mucha pasta, y esto lo saben extremadamente bien las compañías que venden los antídotos de la seguridad. Ejemplos:
– Fundas de móvil, que no protegen el cristal de la pantalla
– Candados de pitón para las motos, que luego roban cargándolas en furgonetas
– Cinturones en los aviones, que no mantienen el torso pegado al asiento
– Cualquier tipo de alarma sonora, que sirve para despertar al vecino
¡Ojo! No digo que estos productos sean del todo malos. El problema es que la prima que se paga por ellos no es barata, para la función -disuasoria en muchos casos- que tienen. En el ámbito laboral, sucede algo similar: los trabajos aparentemente seguros, son caros.
Irene dice
Al hilo de esto, os recomiendo acercaros a la figura de Zygmunt Bauman, el autor de ensayos sobre lo que él llama la «sociedad moderna líquida», que oscila continuamente entre el deseo de libertad y y el deseo de seguridad. Yo estoy leyendo ahora «Vida líquida» y me está encantando.
Saludos!
Irene
Luis dice
Hola Ángel
Muy buen post.
Muy de acuerdo con los activos que hay que tener para estar tranquilo.Y de ellos me quedo con las habilidades.El dinero es muy importante…muchísimo…las relaciones aún más.Pero ambos se pueden perder por diferentes motivos pero tus habilidades te van a acompañar toda tu vida, y probablemente las vas a mejorar conforme pasa el tiempo.Hay una frase que guía mi vida»sólo posees lo que no puedes perder en un naufragio».He vivido en tres paises y lo más importante que he llevado conmigo son mi pasaporte y los diplomas universitarios….Que no son más que habilidades adquiridas.Y en los tres paises me ha ido bien luego ganando dinero y amigos.
Saludos
Alejandro Castrelo dice
Conciso y veloz.
Desde luego una vida predecible y la supuesta sensación de estabilidad solo derivan en una vida mediocre. De las pocas certezas que tengo en esta vida, es que es limitada, El potencial de crecimiento es inmenso, mientras lo único que uno puede perder verdaderamente es absolutamente nada.
«Coged las rosas mientras podáis, veloz el tiempo vuela; la misma rosa que hoy admiráis mañana estará muerta»
– Walt Whitman.
Así que si podemos elegir: ¿Por qué no vivir al máximo?
Abrazos transatlánticos!
Alejandro
Ana dice
Ángel genial que hayas sacado este tema!! Mil gracias!!
No puedo estar más de acuerdo contigo, es más, en mi caso personal, la certeza me destruye poco a poco y es como si me ahogara. Sin embargo, la incertidumbre es lo que me mantiene viva, alerta a las oportunidades y a las nuevas experiencias!!
Si no existiera tanta necesidad de certeza, la curiosidad dominaría la cantidad de mentes dormidas que existen a nuestro alrededor, y no es que no tengan potencial, para nada, es simplemente que con la necesidad de poder predecir tooodo han conseguido acallar su potencial.
Es mi más sincera opinión. Puedo estar equivocada, pero así lo siento.
Gracias mil por tu reflexión de hoy!! A disfrutar de la semana!
Ana
Caro chan dice
Yo tengo la certeza del hoy, y si me apuras hasta el fin de semana, porque puede que mañana se despeñe mi autobús yendo a San Sebastián ¿Quién sabe? (Ay virgencita que me quede como estoyyyy…jajajja)
Algo que he aprendido con el tiempo es que pensar en un futuro lejano me crea ansiedad (además de que tengo cada lista de cosas que quisiera estar haciendo de aquí a cinco años que a cual más absurda), así tomé la determinación de ir año a año y con un máximo de tres. ¿Qué quiero conseguir este? Pues aprender en profundidad el tema frontend y conseguir un desk surf en alguna empresa que me resuene. ¿Y el que viene? Conseguir un trabajo como junior, en remoto y subir muchísimo el nivel…¿Y el otro? Hackear el sistema y posicionarme como senior en solo un año de junior¿Será posible? Nadie tiene la certeza de que no así que de ese modo la ausencia de certezas también puede jugar a nuestro favor.
Joder, releo el párrafo y parece que rezumo seguridad y autoridad a chorros…jajajajaja…como engaña internet. Ando cagada! XDDDD
Chuuuuu!!!
Vicente dice
Buen post Ángel!
Un par de comentarios.
Antifrágil, insuperable para replantearse tantos paradigmas con los que nos han alienado desde que nacimos para imponernos patrones racionales de causa y efecto. Crearnos aversión a la incertidumbre para construirnos un estado mental de seguridad. Pura psicología humana que se alimenta de las expectativas que nos crea seguir la senda establecida socialmente.
Yo creo que la clave está en descubrir, gestionar y utilizar nuestro verdadero talento, que no siempre habrá de coincidir con lo que nos han impuesto o hecho creer. Solo ese autoconocimiento nos dará armas para defendernos ante cualquier cambio y nos hará libres e independientes.
No se equivocaba Sócrates con su «conócete a ti mismo».
Abrazo a todos.
Vicente
marketing digital extremadura dice
Muchas gracias por los consejos porque todo el mundo en su vida ha experimentado inseguridad en algún momento dado.
Lo importante de todo esto, es que tiene solución, podemos trabajar en nuestro crecimeinto personal y en sentirnos mejor con nosotros mismos y con el mundo que nos rodea, mejorando con ello nuestra calidad de vida y laboral 😀
Ana Rosa Alegre dice
Creo que ya te dije, al principio de conocer tu blog, que había sido una suerte encontrarte.
Cada semana, lo corroboro. La semana pasada te pregunté qué se puede hacer cuando alguien ya sabe toda la teoría y se da cuenta que su vida necesita un cambio, qué tiene que hacer para mandarlo todo a tomar por saco y salir de esa zona de confort en la cual todo es predecible y donde esa falsa seguridad puede ser quebrantada por cualquier imprevisto.
Pues bien, para mi este es el post que me ha hecho caer del burro.
Mil gracias Ángel.
Irene dice
Ay madre! Acabo de descubrir que no estoy como una cabra!
Incluso acabo de definir un patrón en mí que me hace hasta predecible ( recordaré esto la próxima vez q hable con mi madre). No soy alérgica a la » normalidad», busco opciones!!!! Jajaja
Enhorabuena Ángel. Soy una recién llegada, pero has conseguido captar algo más que mi atención!!!!
Lina dice
Hola,
Es la primera vez que escribo, te sigo desde hace unos días…
Veo cantidad de gente en consulta con dinero, habilidades (muchos títulos, etc) y buenas relaciones con su entorno y con mucha inseguridad ante la vida. Sinceramente la seguridad basada en «cosas externas» (dinero, títulos, etc) no es una seguridad real, en cuanto esto falla se desbarata…Pasa como con la felicidad, que ya sabemos que no la da el dinero ni nada externo. Y siempre hay algún listo que dice… «prefiero estar triste en un ferrari»… bueno, yo prefiero ser feliz en un seat panda… 😉
Por eso es importante buscar la seguridad dentro de nosotros y no fuera. Cuando dices que la verdadera seguridad consiste en ser capaz de reaccionar ante cualquier situación sea cual sea… genial! esta idea te la compro.
Y en cuanto al tema del trabajar por cuenta ajena o por cuenta propia… si partimos otra vez de la idea de que un trabajo u otro te de seguridad… (cosa que no comparto como ya he explicado) creo que tanto unos como otros tienen razones para estar seguros o inseguros, depende de si vemos el vaso medio lleno o medio vacío.
La cerveza sin alcohol me sabe aún peor que la «normal»… 😉
Gracias por tu blog. Me esta gustando mucho. Un saludo
Adrian David Rodriguez Lopez dice
Cuanta verdad, la verdad elegimos lo predecible por este tema de la fragilidad, por que creemos que cualquier fracaso va ser definitivo, olvidandonos que es la unica manera de lograr algo, intentarlo, que uno no va a hacerlo bien la primera vez….La cuestion es fortalecer la seguridad de sus capacidades, objetivos, de sentirse 100% seguro y comprometido consigo mismo asi este aburrido, cansado, sin ganas de hacer nada, pero el sentirse seguro de sus capacidades hara que avance otro paso hacia el exito….Gran articulo como todos los leidos, saludos :).
Fabiana dice
Genial Ángel! Aún no me había puesto a pensar en la contraposición de estos dos conceptos… Tus preguntas me ayudan a enfocarme más en mis proyectos de desarrollo independiente, para dejar de trabajar en relación de dependencia. Gracias por compartirlo! Feliz día extra del año!!!
ROOSEVELT MARTINEZ dice
Buenas, Angel
Verdaderamente muy buen post porque no me lo había planteando, así si me quedo sin empleo y sin suficiente dinero, estaría muy fea la cosa hay que hacer cambios y para mejor y no depender de un trabajo, como dice el libro de Robert Kiyosaki el cuadrante del dinero tenemos que pasar al lado derecho del cuadrante y no ser empleados E o autoempleados A.
tomare mucho en cuenta de mantener mi seguridad alta.
Un Abraso,
Roosevelt Martinez
romaocconer.com
JOSE IGNACIO dice
La incertidumbre era el pan nuestro de generaciones anteriores a las nuestras ( mis abuelos , etc ). Se quiso «securizar» tanto la vida, que al final nos olvidamos de vivirla dentro de ese corsé donde la metimos. La vida es por definición incertidumbre, pues es efímera, y lo efímero cambiante.
Lorena dice
Esta vez me ha hecho reír tu entrada porque esta frasecita me pasó justo en febrero:
«Una buena manera de evaluar tu nivel de seguridad real es preguntarte qué pasaría si de la noche a la mañana perdieses todas tus fuentes de ingresos.»
Perdí el dinero que según yo estaba para el mes y la verdad es que no tenía una fuente de ingresos que me respaldara. Voilá, de pronto tuve que repasar todas las habilidades que he adquirido en mi vida y hasta las posesiones que la verdad no me interesan para venderlas (como libros, porque si tengo algo de compradora compulsiva es comprar libros en oferta que a veces jamás leeré).
Lo genial fue que descubrí que sabía hacer muchas más cosas que generaban dinero de las que hubiera creído, lo cual me dio bastante seguridad (aunque no dinero inmediato, pero por algo se empieza =P).
Resumiendo: tu entrada no es algo que «me está pasando», sino algo que me acaba de pasar.
Disfruté mucho leyéndolo y viéndome retratada jeje, además me ayudó a reforzar algunas cosas que ahora sé que debo tener muy presentes.
Agustin Torres dice
In cre i ble!
Que bueno saber que voy por buen camino y que hay tantos que me acompañan. Me levante por la mañana pensando nada más en desayunar y me encuentro con estos posts que resumen todo lo que estoy haciendo hasta el momento para lanzar mi propio negocio y ya solo depender unica y exclusivamente de mi mismo.
En pocas palabras «posts aplastantes». Leí este y el anterior, y realmente que las ideas quedan «más que claras». Es espectacular la claridad con la que están expresadas las ideas, así que un simple gracias de corazón Ángel.
A cualquiera que haya leído, comentado o incluso al autor, qué libros me recomendás sobre esta temática o similar?
Creo que no tengo mucho más que decir, solo que ya es tiempo para que cada uno «a su tiempo» vaya saliendo de la zona de confort. Algunos van a abrir la puerta poco a poco y otros van a dar un portazo en cuanto se den cuenta de que necesitan un cambio en su situación actual. No importa ya que el tiempo no existe, pero sí «tengamos el valor de hacer algo que valga la pena». Los únicos responsables de nuestra felicidad somos nosotros mismos y hay que actuar en consecuencia. Mucho amor propio jaja!
Un abrazo! y gracias a todo el «crow» por los comentarios tan valorables! Ayudan a concluir el post realmente y no quedar en el aire!
Jose A. Galián dice
Lo de que la mayoría de la gente prefiere seguridad, o sensación de seguridad, a una incertidumbre que puede ser mas productiva, es que aún muchos creen que ser funcionarios es el mejor trabajo del mundo.
Sin duda, tiene muy buenas condiciones, pero al igual que no todo el mundo sería feliz montando su popio negocio tampoco todo el mundo sería feliz siendo funcionario o trabajando por cuwnta ajena.
Por eso es tan importante conocerse a uno mismo, para saber que camino escoger.
Ivan y Erika dice
Post corto pero al grano! Muy bueno por cierto. No nos habíamos planteado ese matiz a la hora de definir esos términos, es verdad que no son precisamente lo mismo y no hay que confundirlos.
Por cierto, el que valora una buena cerveza sabe que una «sin» no es lo mismo, y afirmarlo no significa hacer apología del alcoholismo ni mucho menos, no dramaticemos no?
En resumen: ¡viva la incertidumbre con seguridad y la buena cerveza!
Ivan y Erika
sofia dice
Parece que siempre tengo que leer tús post cuando es el momento adecuado.
Gracias
luca dice
Interesante la distinción entre seguridad y certeza.
Mucha gente está dispuesta a ceder su libertad a cambio de seguridad ( un trabajo supuestamente seguro, una vida predecible ).
La incómoda sensación de inseguridad que viene con la libertad puede ser dificil sobrellevar, y no todos están dispuestos.
Supongo que más gente lo estaría si de verdad se parara a pensar qué gana y qué pierde con cada una de las opciones.
¿De verdad merece la pena quedarse con una vida predecible – que encima poco tiene de seguridad real, como bien explicas – cuando lo que te queda a cambio son un par de horas delante de la tele y un par de noches de bares los fines de semana?
Cuando se vive en piloto automático, parece que eso es lo que queda, y lo que la gente acepta, a veces con entusiasmo.
Quizá el secreto de la serenidad puede que sea aprender a conformarse con gintonics y series americanas.
Pero como bien expones en tu blog, otra forma de vivir es posible. Que merece mucho más la pena.
Creo que una de las mejores descripciones de la vida que obtenemos cuando cedemos nuestra libertad a cambio de una falsa seguridad la expone Alan Watts en su discurso «What Is Wrong With Our Culture»:
«Corremos a casa después del trabajo para empezar nuestra vida de verdad, para hacer lo que queremos. Y eso para muchos se queda en mirar una reproducción electrónica de la vida.
Se podría pensar que cuando la gente vuelve a su casa para vivir su vida en sus propios términos, esto sería montar un banquete colosal, hacer el amor sin parar o una fiesta de música y baile.
Sin embargo, resulta que lo único que quiere hacer es contemplar una pantalla de forma totalmente pasiva.»
Si ese es el premio que nos otorga el ceder nuestra libertad a cambio de una supuesta seguridad, mucho mejor entonces seguir otro camino – si nuestro cerebro atrofiado nos lo permite…
Este blog es una guía útil y práctica para eso, gracias por compartir reflexiones interesante.
un saludo
Douglas Sibrián dice
Gracias por el artículo, de manera amena y fresca me has hecho pensar sobre este asunto, saludos!
Carlos dice
Muchísimas gracias Ángel por este artículo, y cuánta razón tienes.
Todos deberíamos cuestionarnos este tipo de cosas para crecer como personas y valorar qué cosas son importantes en esta vida y cómo la queremos vivir!
Gracias de nuevo!
Un abrazo