La semana pasada te presenté una idea muy poderosa:
Que tu situación actual, el punto en el que te encuentras ahora mismo, es el producto directo –la proyección– de los sistemas que has ido creando consciente e inconscientemente a lo largo de tu vida, y que por tanto, la mejor manera de conseguir algo no es buscarlo directamente sino construir los sistemas necesarios para generar ese resultado de manera natural e inevitable.
En el post de hoy quiero profundizar en esta idea y hablarte de su aplicación práctica, más concretamente contarte qué tipos de sistemas existen y cómo crearlos.
Por qué necesitamos sistemas
Vivir es sinónimo de progresar. Desde el día en que nacemos no paramos de aprender, de mejorar, de crecer. Queremos hacer más cosas, y que lo que hagamos tenga cada vez un mayor impacto.
Sin embargo, por muchas ganas que tengamos y por muy rápido que queramos ir, nuestro crecimiento y nuestra productividad están limitados por dos factores:
- Nuestros recursos son finitos. Expandirse requiere una inversión de tiempo, energía y/o fuerza de voluntad, recursos de los cuáles sólo tenemos una cantidad determinada por día. Aunque podemos aumentar nuestras reservas de energía y fuerza de voluntad, siempre existirá un tope y los días tendrán 24 horas.
- Nuestra capacidad de procesamiento es limitada. La mente consciente, igual que un ordenador, sólo puede procesar una cierta cantidad de información a la vez. Es cierto que algunas personas nacen con un mayor «ancho de banda» que otras, pero existe un techo.
La única manera de superar estas limitaciones naturales es creando sistemas que trabajen por nosotros. De esta manera deja de existir un máximo respecto a lo que podemos conseguir. Cuantos más sistemas construyamos y mejor funcionen, más podremos abarcar, más fácil será conseguir resultados y mejores serán estos.
Esta es una lista de los distintos tipos de sistemas (o semillas de ellos) que existen, ordenados de menor a mayor en función de la cantidad de recursos que ahorran.
1. Principios
Tus valores, como su nombre indica, son las cosas que consideras importantes. Tus prioridades.
Tus principios son lo que conectan tus valores con tus acciones. Son señales que te indican el camino a seguir, y que te permiten determinar si una acción es correcta o incorrecta. Cuando tienes que tomar una decisión complicada, acudes a tus principios para saber qué es lo que debes hacer.
Un ejemplo. Hace poco me di cuenta de que un chico me había pagado dos veces el mismo curso. Podría haber hecho como si nada y quedarme con el dinero, pero uno de mis principios es que ser honesto es más importante que ganar pasta así que le devolví los 97 euros inmediatamente.
Es importante tener principios porque te facilitan la toma de decisiones y porque te ayudar a elegir aquellas opciones que te van a llevar a conseguir lo que quieres. Sin unos principios claros, acabarás haciendo cosas que van en contra de tus valores y, por tanto, de tus propios intereses.
Los principios pueden tener distintos orígenes. Algunas veces los creamos nosotros. Otras veces adoptamos los principios de personas a las que admiramos. También existen «packs de principios», como las religiones, las ideologías políticas o el manifiesto de Vivir al Máximo. En cualquier caso, lo importante es que elijas tus principios conscientemente y que estén alineados con tus valores, ya que si no acabarás haciendo justamente lo opuesto a lo que crees.
Aunque los principios no son sistemas como tal, he querido incluirlos en esta lista porque todos los sistemas tienen su origen en una serie de principios.
2. Reglas
Las reglas son instrucciones concretas para aplicar uno o más principios, y se derivan directamente de estos.
Mientras que los principios son guías abstractas para la toma de decisiones, las reglas son mucho más específicas y te dicen exactamente qué es lo que debes hacer.
Por ejemplo, el principio «ser honesto es más importante que ganar dinero» da lugar a varias reglas que aplico en mi negocio:
- Si un cliente paga de más, devolverle el dinero aunque no se haya dado cuenta
- Jamás mentir ni ocultar información relevante a mis lectores, aunque hacer esto suponga menores ingresos
- Etc.
Las reglas son especialmente útiles para situaciones que se repiten una y otra vez, ya que automatizan por completo la toma de decisiones, lo cual supone un ahorro de recursos. Pueden ser auto-impuestas (voy a hacer ejercicio de lunes a viernes a las 6 de la tarde), o impuestas por una entidad externa (sólo puedes cruzar cuando el semáforo está en verde).
La mejor manera de asegurar que se siguen las reglas es que existan consecuencias negativas para el que se las salte. Por eso, sueles respetar más las reglas que te pone tu jefe que las que te pones tú mismo.
Una regla o conjunto de reglas que generan un resultado determinado es la forma más básica de sistema.
3. Hábitos
Ok, aquí es donde la cosa se empieza a poner interesante.
Si recuerdas, los dos cuellos de botella que tenemos a la hora de expandirnos son nuestros recursos y nuestra capacidad de procesamiento. Sin embargo, los sistemas que hemos visto hasta ahora no ayudan mucho al respecto; lo único que hacen es reducir la cantidad de tiempo y fuerza de voluntad que empleamos en la toma de decisiones. Los hábitos, por el contrario, nos permiten saltarnos esas limitaciones y llevar nuestro rendimiento y desarrollo personal a otro nivel.
Un hábito es una acción que haces de manera regular con poco o ningún esfuerzo. Es algo que haces prácticamente sin pensar, de forma inconsciente.
La clave está en entender esto último: que los hábitos son tareas que se ejecutan inconscientemente.
Imagínate que en tu cabeza tienes un súper-ordenador y un operario. Tu mente inconsciente es el súper-ordenador. Tiene una capacidad de proceso prácticamente ilimitada y puede ejecutar miles de acciones al mismo tiempo sin inmutarse. El operario, que representa a tu mente consciente, está muy limitado. Sólo puede encargarse de una cosa a la vez, su capacidad de cálculo es mucho menor y se cansa fácilmente, pero es el único que puede programar el súper-ordenador.
Crear un hábito es trasladar una tarea que antes hacía el operario al súper-ordenador. De esta manera, no sólo liberas todos esos recursos sino que ganas en consistencia, ya que tu inconsciente es mucho más fiable que tu fuerza de voluntad.
Como tu mente inconsciente tiene un ancho de banda infinito y puede hacer muchas cosas a la vez, desarrollar buenos hábitos te hará invencible.
¿Alguna vez te has preguntado por qué ciertas personas son capaces de hacer de todo y conseguir resultados extraordinarios? No es porque sean más inteligentes ni porque sus días tengan más horas, sino porque han construido mejores hábitos.
CÓMO CREAR UN HÁBITO
«Somos lo que hacemos repetidamente, la excelencia entonces, no es un acto, sino un hábito»
—Aristóteles
Aunque existe abundante literatura sobre la creación de hábitos, aquí tienes un resumen del proceso y algunos consejos:
- Para crear un hábito necesitas repetir un comportamiento de manera regular hasta que se vuelva inconsciente
- Al contrario de lo que mucha gente piensa, no se tardan 21 ni 30 días en formar un hábito, sino que depende de la persona, del hábito y de las circunstancias. Como media, te llevará entre 2 y 8 meses en conseguir que una determinada acción se vuelva automática
- El error más común es querer desarrollar demasiados hábitos a la vez. Recuerda que añadir un nuevo comportamiento o sustituir uno existente requiere fuerza de voluntad, que es un recurso finito y limitado. Los cambios demasiado bruscos son insostenibles y una receta para el fracaso
- Minimiza el gasto de fuerza de voluntad manipulando tu entorno. Es más fácil no comer chocolate cuando no hay chocolate en tu casa
- A la hora de crear un hábito, es más importante la consistencia que la cantidad. Mejor meditar 5 minutos todas las mañanas, y aumentar el tiempo una vez que hayas establecido la rutina y sentarte a meditar no te suponga un esfuerzo, que empezar con 1 hora desde el principio y abandonar a los pocos días porque es demasiado difícil
- Empieza desarrollando aquellos hábitos que vayan a producir un efecto dominó en tu vida. Hacer ejercicio de manera regular, llevar una alimentación equilibrada o dormir bien son hábitos que tienen un impacto positivo en todo lo demás
- La gran mayoría de acciones que realizas cada día las ejecuta tu mente inconsciente, y vienen dictadas por los distintos hábitos que has ido desarrollado a largo de tu vida. Por lo tanto, más que crear nuevos hábitos, lo que vas a hacer es reemplazar o arreglar los hábitos que ya tenías. Reprogramar el ordenador
4. Delegación
Delegar tareas a tu mente inconsciente en forma de hábitos es una técnica muy potente, porque te permite procesar más cosas a la vez y liberar recursos para seguir expandiéndote.
Sin embargo, existe una manera aún más efectiva de conseguir el mismo resultado: delegar esas tareas… ¡a otras personas! De esta manera ni si quiera tiene que encargarse tu subconsciente 🙂
El principal problema a la hora de implementar esta estrategia es que no puedes contratar a alguien, decirle «hazme esto» y esperar que lo haga exactamente igual que lo hubieses hecho tú. Cada individuo tiene una manera distinta de procesar el mundo y de trabajar, y aunque esa persona ponga todo su esfuerzo en la tarea en cuestión, el resultado será distinto a lo que tú esperabas por un sencillo motivo: los seres humanos no podemos leernos la mente los unos a los otros.
La solución a este tipo de malentendidos es documentar paso a paso las tareas que quieras delegar, explicando exactamente qué se debe hacer en cada situación. De esta manera, conviertes algo abstracto como «encárgate de los e-mails» en un manual de instrucciones que, aplicado correctamente por cualquier persona, produce los mismos resultados que si esa tarea la hicieses tú.
Esto es lo que hacen las grandes empresas como McDonalds, que tienen documentados todos y cada uno de sus procesos. Por ejemplo, los empleados reciben instrucciones exactas para hacer las hamburguesas:
- Calentar la plancha a 200 grados
- Colocar tres hamburguesas sobre la plancha
- Cuando hayan pasado 43 segundos, darles la vuelta
- Mientras se cocinan por ese lado, preparar las cajas y el pan
- Etc.
Lo mismo ocurre en los hospitales, donde tienen protocolos para todo. Todas las enfermeras saben exactamente lo que deben hacer en cada situación e incluso tienen una metodología específica para hacer las camas.
Documentar procesos es la única manera de crear «sistemas humanos», en los cuales las personas son partes de una gran máquina que funciona como un reloj. Este es un ejercicio muy positivo para ti, porque te obliga a tener claro qué es lo que quieres, y también tiene muchas ventajas para la empresa:
- Los resultados son consistentes. Un Big Mac sabe siempre igual, vayas donde vayas
- Nadie es imprescindible. Da igual que las hamburguesas las haga Juan que las haga María, porque las van a hacer exactamente igual
- Se reduce el tiempo de formación de los empleados, que desde el primer día saben qué es lo que tienen que hacer porque viene en el manual de instrucciones
- Si algo falla sólo hay dos posibilidades: el sistema no funciona y hay que mejorarlo, o el empleado ha metido la pata y hay que penalizarle
Aunque delegar es una técnica muy potente, también tiene sus propios desafíos.
El primero es que no todo se puede escribir como una lista de pasos. No existe un manual de instrucciones para escribir una buena novela o programar un buen plugin de WordPress (aunque sí que hay principios y reglas o best-practices). Por eso los trabajos creativos se pagan tan bien.
Luego están todos los problemas que surgen cuando trabajas con personas: se ponen enfermos, se marchan de un día para otro, hacen huelgas… Un sistema humano no es 100% pasivo. Siempre hay que estar monitorizándolo y ajustándolo.
Por último, no todo el mundo vale para todos los trabajos. Para poder delegar de forma efectiva, primero necesitas encontrar a la persona adecuada para ese puesto.
Afortunadamente, existe una manera de delegar evitando la mayoría de estos inconvenientes.
5. Automatización
Automatizar consiste en delegar una determinada tarea a una máquina en vez de a otro ser humano.
Esto tiene muchas ventajas porque las máquinas no se cansan, no se ponen enfermas, no se quejan, no se van a la competencia, no se equivocan tanto y no requieren tanta monitorización como las personas, lo cual permite reducir costes y aumentar la productividad.
Para automatizar un proceso necesitas documentarlo y descomponerlo en una serie de reglas o pasos lineares, igual que si fueses a delegarlo en un empleado. La diferencia es que en vez de redactarlo en castellano, tienes que escribirlo en un lenguaje que el software de turno pueda entender.
La automatización es el santo grial de la consolidación y los ingresos pasivos, y una de mis grandes pasiones. Un sistema bien diseñado y 100% automático me parece una obra de arte.
Este 2015 estoy centrándome en automatizar todo lo que puedo, y si te has apuntado a Idea2Blog lo habrás notado:
- El proceso de compra se puede hacer sin ningún tipo de intervención por mi parte
- Durante cuatro semanas, cada 7 días se libera automáticamente el siguiente módulo del curso
- Durante el curso te van llegando e-mails informándote del nuevo material y ayudándote con el mismo
Todo lo anterior ocurre sin ningún tipo de intervención por mi parte. Los sistemas informáticos que he configurado trabajan por mí mientras yo estoy tomando un gelato de nocciola frente al Coliseo.
Obviamente, las máquinas no pueden hacerlo todo (por ahora), y hay cosas que a los humanos se nos dan mejor (de momento), pero siempre que puedas elegir entre persona o máquina para hacer algo por ti sin que afecte a la calidad del resultado elige lo segundo.
6. Eliminación
Sólo existe una estrategia más eficiente que programar una máquina para que realice una cierta tarea por ti: no hacer esa tarea; eliminarla por completo.
Esta es una alternativa que solemos ignorar, cuando debería ser la primera a tener en cuenta. Antes de pensar en delegar o automatizar un proceso tendríamos que preguntarnos si realmente es necesario, y muchas veces descubriríamos que, en el fondo, no es tan importante.
Para decidir si deberías seguir haciendo algo, mide los recursos que está consumiendo y el impacto que tiene en el resultado final, y en función de eso evalúa si te merece la pena.
La famosa estrategia del 80/20 de la que Tim Ferriss habla en su libro se basa justamente en eliminar sin piedad todo lo que no es esencial y centrarse sólo en el 20% de las tareas que producen el 80% de los resultados.
¿Por dónde empezar?
Lo que te acabo de presentar es algo así como mi «jerarquía de sistematización». Eres libre de usarla cómo creas más conveniente, pero en caso de que no sepas muy bien cómo crear un sistema, aquí tienes algunas ideas para añadir nuevos sistemas a tu vida:
PASO #1: DEFINE TUS PRINCIPIOS
El primer paso es tener claro cuáles tus principios, ya que son el origen de todo. Son los faros que te guiarán tanto en lo personal como en lo profesional.
Para definir tus principios, pregúntate: ¿qué es lo que más valoro (en otras personas o negocios)?
No hace falta que lo tengas todo perfectamente claro. Tus principios irán evolucionando a lo largo del tiempo en función de las experiencias que vayas viviendo y de las reflexiones que extraigas de ellas.
PASO #2 – CREA REGLAS Y PROCESOS
Una vez que hayas definidos tus principios, el siguiente paso es conectarlos con tus objetivos mediante reglas.
¿Qué reglas que se deriven directamente de tus valores debes aplicar en tu día a día para conseguir esas metas?
Una vez que las tengas, intenta ponerlas por escrito descomponiéndolas en forma de procesos: sucesiones lineales de pasos que producen un resultado determinado.
PASO #3 – AUTOMATIZA ESOS PROCESOS
Para cada uno de los procesos del paso anterior, empieza por preguntarte: ¿es realmente necesario hacer esto?
Si la respuesta no es un claro sí, elimínalo.
Por el contrario, si la respuesta es afirmativa, piensa en cuál es la mejor manera de delegar ese proceso: que lo haga tu subconsciente, que se encargue otra persona, o que se ocupe de ellos una máquina.
Normalmente, para los temas personales te interesará desarrollar hábitos, mientras que para todo lo demás te resultará más conveniente delegar o automatizar.
Nunca dejes de mejorar tus sistemas
Tus resultados dependen directamente de la calidad de tus sistemas.
Es imposible crear sistemas de negocios o de cualquier otra cosa y predecir cuáles van a ser esos resultados, ya que unos sistemas interaccionan con otros creando reacciones en cadena demasiado complejas para poder comprenderlas, pero siempre aplica una máxima:
Cuanto mejores sean tus sistemas, mejores serán tus resultados
Por eso, simplemente céntrate en mejorar tus sistemas y los resultados llegarán solos.
Empieza por arreglar aquellos sistemas que en este momento sean un cuello de botella o por desarrollar aquellos que tienen el potencial de generar un efecto dominó en tu vida, y repite el proceso una y otra vez. Conseguir la vida con la que sueñas será sólo cuestión de tiempo.
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¡Ya estoy en Roma! De momento, lo que más me ha llamado la atención de la ciudad es la cantidad de Smarts que hay. ¡Están por todas partes! Yo que creía que el invento de Mercedes había sido un fracaso, y resulta que todas las unidades las han comprado los romanos…
Estos dos últimos posts sobre sistemas están inspirados en el libro Work the System, de Sam Carpenter. Imprescindible. Muchas gracias a Alejandro Castrelo por recomendármelo 🙂
Foto: Engranajes
Eduardo Duque dice
¡Buenos días, Ángel!
Me ha encantado el artículo. Estaba deseoso de ver la segunda parte después del de la semana pasada, y aquí estaba pendiente desde primera hora de la mañana hasta que lo colgaras en la web. Y eso en sí mismo es un sistema: Colgar el artículo todos los lunes a la misma hora.
Yo le he dedicado muchos meses a esta idea de los sistemas, y creo que mi fallo principal acaba recayendo siempre en lo más básico y que es a lo que, inconscientemente, le doy menos importancia: Los Principios.
Uno cree que tiene unos principios geniales e ideales, pero lo más probable (como pasa en mi caso), es que realmente mi yo consciente no tenga tan claro cuáles son esos principios. Ni los tengo por escrito, ni me los recuerdo a diario, ni nada de nada. Vivo creyendo que tengo grandes principios, pero a la hora de la verdad, no puedo enumerarlos porque no los tengo presentes todo el tiempo.
Empezaré esta vez a fabricar mi sistema por este punto, y espero que pronto empiecen a aflorar las señales de que voy por el buen camino.
Un saludo extraordinario, Ángel. Eres una verdadera referencia para mi y mucha más gente.
Eduardo Duque
Showmetheviral.com dice
crear sistemas es la clave, especialmente cuando tienes poco tiempo disponible y lo tienes que desicar algo muy productivo, hay que intentar clonarse a uno mismo para sacar el maximo provecho al tiempo utilizado… Cada vez más importante trabajar en este sentido…
Javier González dice
La verdad es que conseguir que una maquina o la tecnología consiga hacer un trabajo que antes tenías que hacer tú (además suelen ser generalmente procesos repetitivos y/o aburridos) es una gran liberación de tu tiempo. Yo intento hacer eso en mis negocios personales, está claro que los días tiene 24 horas y tenemos que hacer un uso eficiente de ellas…
Pero me da un poco de miedo no saber donde va a acabar el trabajo humano. Cómo dices, los trabajos mas artísticos siempre (??) tendrán cabida con humanos pero el resto… Cómo ingeniero entiendo perfectamente la idea de sistemizar y de usar eficientemente los recursos. Pero me pregunto que pensará un estudiante de artes, por ejemplo.
teoma dice
El proceso artístico no esta reñido con la sistematización, incluso la sistematización de experiencias es un proceso muy rentable en el ámbito artístico. Otra cosa muy distinta es la mecanización en procesos artísticos, ahí es donde la idea puede sucumbir ante la tecnología.
Un saludo.
Diana Garcés dice
Esto es más que un artículo, es toda una guía para seguir y analizar. Me ha encantado y me viene como anillo al dedo para nuevas ideas, proyectos y actividades que tengo que empezar a desarrollar.
Gracias por inspirarnos y brindarnos tan buenas ideas.
Un abrazo desde Colombia 🙂
Bosco dice
Muy bueno Ángel. Esta entrada capta la esencia de dos libros: «Los 7 hábitos de la gente altamente eficiente» (los primeros puntos) y «La semana laboral de 4 horas» (la segunda parte) pero explicado de manera sencilla 🙂
Una entrada para leer una vez… cada semana 😉
Un abrazo!
jose manuel dice
¡¡Muy buen post!! Estas entradas resultan muy inspiradoras
Realmente te veo un gran potencial como coach/mentor en estos temas de desarrollo personal, sobre todo al ser testigos en tu blog de tus propias luchas personales.
Comparto el pensamiento del ingeniero sobre los riesgos de esta revolución digital y marketiniana. Vamos a llegar a depurar tanto algunas prácticas que al final se escribirán novelas por robots y lo único que habrá detrás será un procesamiento muy complejo eso sí de nuestros gustos de consumo
Mario dice
Hola jose Manuel!
¿De verdad crees que una novela podría escribirla un robot?
Me parece que no hemos entendido muy bien que las emociones juegan un papel muy importante en la vida, y eso nos hace humanos.
Ponle a un robot a contarte un chiste, a hacer un monólogo, a dar un concierto y después me dices qué tal en comparación con un buen ser humano que lo haga. No digo que no lo pueda hacer, pero me parece que sería bastante limitado.
Las novelas suelen contar historias humanas, con pensamientos y sentimientos humanos. Reducirlo todo a una mera acumulación y repetición de palabras me parece algo simplista.
¿Crees que un robot podría escribir El Quijote, Guerra y Paz, Romeo y Julieta, o cualquier otra novela actual que te guste?
Un saludo!
Alejandro Castrelo dice
Como me dijiste ayer, un gran megapost!
Eres un hacha en explicar de manera sencilla conceptos complicados, simplicity is best!
En cuanto a sistemas, mi tío, por ejemplo hace un número de horas exacto de ejercicio al día, mi hermano va al gym 1h30min de lunes a viernes, y ambos están en genial forma física. Igual que el estudiante que todas las tardes dedica 1h al Inglés, llegará a saberlo, los sistemas son cruciales en la consecución de objetivos. Además y sin lugar a dudas la gente más exitosa que conozco tiene sistemas alrededor de todo lo que hacen en sus vidas.
Aunque a veces, me da miedo pensar que implementar tantos sistemas es una manera de robotizar nuestras existencias, paradójicamente, creo que la libertad suprema se consigue al hacerlo, ya que tienes tiempo para disfrutar cosas que realmente te apasionan, y de esta manera seguir creciendo.
Me halaga la mención en tu épico post. Espero también que sigamos inspirándonos con el descubrimiento de estas joyas que crean nuevos paradigmas en nuestras vidas.
Un abrazo Ángel!!
Mario dice
Muy interesante.
Yo en cualquier caso prefiero centrarme en que mis sistemas y hábitos vayan directamente orientados a mejorar la vida de los demás (en primer lugar).
Algo que en este mundo egoísta y egocéntrico donde actualmente vivimos no veo muy a menudo.
Y pongo un ejemplo: ¿todos estos sistemas tienen como objetivo que los demás estén mejor, o tienen como objetivo que yo consiga mis propósitos (en primer lugar), y luego, si ocurre, que ayude a los demás?
Pones el ejemplo de McDonalds. ¿Qué valor crea una empresa de comida basura por muchos ingresos que genere y muchos puestos de trabajo (precario) que cree? Enfermedad, beneficios para farmacéuticas, obesidad, etc. Un valor muy gris, y muy dudoso en mi opinión. Por muy buen ejemplo de eficiencia en el manejo de los procesos que sea.
Y un valor generado, en mi opinión, muy gris también en muchas otras empresas hoy en día, donde el beneficio es lo primero.
Me parece muy bien el post. Son muy buenas herramientas. Simplemente me planteo: ¿al servicio de QUÉ y de QUIÉN lo utilizamos?
Os dejo los Principios y Creencias que más extendidos veo por todos lados. No todos y no de las misma forma, pero en general creo verlos a diario. Luego copiais parte del texto en Google y a lo mejor os lleváis una pequeña sorpresa 😉
X= lo que podéis encontrar en google buscando el texto
1.- Vivir como X quiere decir entonces, vivir según las reglas de la naturaleza, buscando satisfacción material, emocional e intelectual.
2.-Disfrutar la vida lo más intensamente posible, pero de una manera responsable. es decir, sin olvidar las lecciones del pasado y sin dejar de considerar las consecuencias de nuestros actos.
3.-Desarrollar al máximo las habilidades personales.
4.-Tratar a las demás personas de la misma manera que ellas lo tratan a uno. en otras palabras, ser bondadoso con los que nos ayudan, pero implacable con nuestros enemigos.
5.-Toda persona debe aceptar las consecuencias de sus acciones. Sólo se debe ayudar a los que realmente lo merezcan. Los parásitos sociales deben ser abandonados a su propia suerte y los criminales deben ser castigados con la misma severidad con la que perjudicaron a sus víctimas.
6.-Respetar a los animales y matarlos sólo en casos de defensa propia o para usarlos como alimento.
7.-No hay nada sobrenatural. El universo entero consta solamente de materia y energía, pero existen fenómenos y tipos de energía que la ciencia moderna no ha podido aún explicar y que forman el fundamento de la auténtica magia satánica.
8.-Al ser X una filosofía extremadamente individualista, se deduce que un X debe juzgar a otras personas sólo en base a sus virtudes y defectos de carácter personales, pero nunca en base a su raza, nacionalidad, estado de salud, sexo o la religión de sus antepasados
9.-Los X respetamos las leyes de los países en que vivimos, siempre y cuando éstas no atenten contra las libertades personales, y rechazamos cualquier tipo de conducta criminal o asocial.
Un saludo!
Caro chan dice
“Somos lo que hacemos repetidamente, la excelencia entonces, no es un acto, sino un hábito”
—Aristóteles
Esta sin duda es una de mis frases favoritas, creo que fue la causante de que todo hiciera un click en mi cabeza casi tres años atrás (jolin como pasa el tiempo…jejeje) Era una persona cuyo lema era » ley del mínimo esfuerzo», nunca tuve demasiados problemas en sacar las cosas así que si con la ley del mínimo esfuerzo era capaz de hacerlo ¿para que esforzarme?Pero un día decidí que quería dar lo máximo de mi misma, quería sacar ese potencial oculto que sabía que estaba pugnando por salir… No es nada fácil, de hecho muchas veces blasfemo pensando «Con lo feliz que eras en tu ignorancia muchacha…¿Quién carajo te mandaría?»>.< UU
He llegado a un nivel de exigencia que me preocupa…jajaja, pero no me conformo con menos que la excelencia en cada cosa que hago. Le pongo el alma.
Sabes que yo no soy una persona tan organizada y metódica como tú, pero tengo mis propios esquemas mentales y he ido creando hábitos a base de prueba y error. La meditación, el dormir bien -aunque esto último me está costando en Londres, la verdad-, tener una buena alimentación -somos lo que comemos- y sobre todo no permitir que la plasticidad de mi cerebro se pierda…La curiosidad innata en mi llevada a habito puede ser extenuante XD
Me ha gustado mucho el post, lo estaba esperando, el de la semana pasada se me quedó un poco cortito…^.^
Chuuuu!!!!
valeria dice
Gracias Ángel! Necesitaba este articulo para comenzar el día!!!!
Franciscoach dice
Hola Angel,
Me encanta como planteas la mejora personal con el punto de vista del ingeniero, yo soy de letras pero tengo tambien una esencia de constructor de máquinas. Muy bueno el planteamiento y seguro que muy eficaz para quien lo lleve a cabo.
Gracias por seguir compartiendo tu manual de usuario con nosotros 🙂
David Sanz dice
Muy completo! el futuro llega y será parecido a lo que explicas!
Ricardo dice
Yo también un gran fanático de la regla 80-20. No solo se aplica a lo negocios, también en la vida real. Siempre hay un 20% que produce el 80%, el resto no nos hace más que perder el tiempo.
Excelente post Ángel, gracias por compartir.
Un saludo
Daniel dice
Hola, Ángel. Puedo hacerte una pregunta técnica? Por qué el enlace de James Clear está plano y no es clickable? Algún experimento?
Me llevaré lo de la delegación. Primera vez que leo sobre el tema, y de verdad está muy interesante.
Saludos!
Angel dice
Que va, lo del link ha sido un despiste 😛 ¡Ya está arreglado!
Roser dice
Muy buen post!
Realmente los hábitos pueden cambiar totalmente tu vida, tanto los malos a peor como los buenos a mejor…
Elías Manuel Sánchez Castañeda dice
Angel: en forma resumida expones un tema clave para incrementar la competitivida de las personas, gracias por compartir. Elías
Antonio G. dice
La frase de Aristóteles y la parte de CÓMO CREAR UN HÁBITO me han parecido fundamentales, es lo que resaltaría del post porque tiene una aplicación práctica e inmediata.
Por eso me ha gustado este artículo en especial. Porque podemos comenzar a HACER hoy mismo.
La DELEGACIÓN es una de las acciones primordiales si hablamos de negocios. Ninguna empresa es sostenible (ni una unipersonal) en el tiempo si no comenzamos a delegar cosas. Para crecer y focalizar necesitamos delegar.
Estoy pensado en delegar la consecución de mis hábitos a otras personas: Que la compañera de al lado medite contigo nada más levantarte, aunque sea por 5 minutos, por ejemplo. La realización de acciones cuando son acompañadas creo que son más llevaderas, como el ir a correr o el gimnasio.
Genial el post, ahora a por el libro!
William dice
Qué entrada! realmente fascinante y motivante, es para aplicar y mejorar en lo que estamos haciendo.
Excelente Post Ángel.
Un saludo!
Quique Mora dice
Hábitos y rutinas facilitan tu vida,
Tanto o mas importante es desechar malos hábitos,
La edad no perdona e impera cuidar el cuerpo, y la mente, y las emociones.
Con 20 años te comes el mundo ‘a bocaos’ sin sistema, se me hace extraño este tipo de reflexiones en gente de menos de 40 años, aunque quizá la situación socio-económica lo provoque o incremente.
Muy buen índice de vida, un abrazo.
Joel SEO dice
Impresionante, la verdad que hay que llevar buenos hábitos y una buena rutina si no…
Estás perdido, muy buen post !
Saludos, Joel
Yeferson dice
Hola Ángel.
Que buen artículo, está lleno de información valiosa.
Para mi, los hábitos son lo más importante en el desarrollo de un proyecto y en el éxito de un objetivo concreto, pero más allá de eso, los hábitos son nuestros aliados más poderosos para cambiar nuestra vida y mejorar como personas.
También me parece fundamental la AUTOMATIZACIÓN, después de todo el objetivo de las personas que empezamos un negocio digital es crear un sistema que funcione en piloto automático para dedicarle nuestro tiempo a viajar y a vivir como se debe.
Un gran saludo para toda la comunidad de Vivir al Máximo.
Alejandro Caballero dice
¡Buenas Ángel!
Que grande este artículo, siempre he pensado que en delegar y automatizar se encontraba la clave de muchos negocios online, pero no imaginaba que este fórmula tan potente podía aplicarse para crear sistemas en todos los aspectos de nuestra vida.
A mí me parece especialmente delicado el tema de los hábitos. Esto es porque son verdaderamente difíciles de adquirir y muy fáciles de perder, por lo que hay que andar con cuidado de adquirirlos de forma correcta.
Para mí automatizar y delegar es todo un arte y que, salvo aquellos casos que ya están relacionados con mi trabajo como blogger, cuesta lo suyo crear las órdenes y procesos adecuados para dejar responsabilidades en una máquina o en una persona.
Eso si, de conseguirlo es un gran avance a la hora de conseguir la liberación en tu vida.
¡Un abrazo!
Marcela dice
Excelente post! Gracias! Para mí fue súper necesario. Muchas gracias!
Fede dice
Hola Angel!
Muy bueno este post, plasmas perfectamente, de forma clara, concisa y resumida uno de los temas fundamentales y clave en los negocios de hoy en día.
Yo, como ya sabes, soy un gran fan de Tim Ferris, y he estado trabajando mucho en la delegación y la automatización en los últimos 3 años para poder hacer que mi empresa funcione sin mi.
Sin embargo, en los últimos meses me he dado cuenta de que, al igual que lo que comentáis sobre la parte artística, la parte humana comercial, tampoco se puede / debe automatizar totalmente. Hemos hecho unos cambios en mi empresa en los últimos dos meses, cambiando la atención con emails automáticos (respuestas predeterminadas en gmail) por el contacto telefónico con el cliente y la formación comercial de mis empleados, y esto ha generado un aumento considerable en la conversión de prospectos a clientes.
Todo es cuestión de llegar a un equilibrio, y depende de lo grande (en cuanto a personas) que sea tu empresa o proyecto. Aunque ahora te funcione perfectamente que la gente contrate en Idea2blog directamente, seguro que llega un momento en el que consideres tener una persona que atienda llamadas de visitantes de la web, para explicar (y venderles) los cursos, y con eso, aumentar las conversiones y contrataciones.
Obviamente esas personas deberán tener todos los procesos por escrito, y saber que argumentar con cada consulta del cliente. Esta es la parte de delegación, creo que la mas importante.
Son temas de los que se podría debatir durante horas o días, muy interesantes!
Un placer leerte una vez más, espero verte en unas semanas en Madrid.
Un abrazo
Fede
Angel dice
Estoy totalmente de acuerdo contigo, Fede. La automatización no es siempre mejor que la delegación porque hay cosas que las hace mejor un humano que una máquina. Mi opinión es que cada situación es única, y que tienes que evaluar qué es lo que más te conviene en función de los costes y los resultados.
Un abrazo!
Zoysi Fit dice
A mí también me parece una obra de arte un sistema de ingresos bien diseñado y 100% automático 🙁 quién fuera ingeniero informático, cachis!!
Concepción dice
Hola Ángel,
Creo que lo que acabas de publicar es una guía en toda regla sobre organización y gestión del trabajo.
Como dices, empiezas desde lo más básico, que todo el mundo puede poner en práctica desde hoy mismo, hasta lo más complicado. Complicado porque no sabemos bien cómo hacer determinadas cosas, ya que nunca nos han enseñado, por ejemplo, a delegar.
En realidad, cada persona puede identificar en qué punto del proceso se encuentra y a partir de ahí, seguir la guía, adaptándola a su situación.
En mi caso, diría que tengo claros los dos primeros puntos, aunque no documentados (¿crees que es imprescindible ponerlos por escrito?). Y ahora trato de perfeccionar el asunto de los hábitos, que lo mío me cuesta. Hay hábitos que por más que quiera y lo intente, no hay forma humana de fijar. Lo intentaré a partir de ahora con tus consejos.
Un saludo enorme.
Lalo dice
¡Hola Ángel! Acá (México) son tardes y por lo tanto ¡Buenas tardes!
Muy interesante tu post. El análisis que haces y lo digerible de tu forma de escribir hacen del artículo algo muy valioso.
Siento que a mi lo que más me ha fallado es la constancia y me doy cuenta ahora que estoy comenzando con mi blog. Es un hábito que debo trabajar más.
Te invito a que te des una vuelta por mi blog. Chido es como «guay» para ustedes.
¡Un abrazo!
Daniel dice
muy interesante el articulo lo voy a poner en practica saludos
Rodolfo Rojas dice
Eso de mejorar los procesos es cierto, hay un video en internet que hace alusión a la idea del capitalismo en una isla de bananas donde la gente recoge bananas con la mano y despues lo hace con una herramienta en menor tiempo y con menor esfuerzo. Hay gente que puede ser muy esforzada pero se ha quedado en el pasado, incluso hay conceptos en la vida que podrían quedar en el pasado. Hay cosas que uno ve que podrían verlo con mejores ojos, basicamente la idea de crear herramientas viene de la mano con empezar a depender de nosotros mismos y no del sistema en general.
Nuestra sociedad es consumista, gasta mas de lo que puede producir y se supone que una vida ideal vendría siendo como vivir en una villa hobbit con tecnología avanzada. Como recomendación a la gente (cree sus propios productos) consuma pero de lo que usted produce, no le compre a la empresa o dependerá de ella. Si te compras a ti mismo dependes de ti mismo y esa es la mejor manera de combatir a sistema, la inversión en producción propia.
Ivan Rojas dice
Hola Angel 😄, me gusta mucho este post, muy bueno 👍 de verdad que te hace pensar en tu día a día.