Este es el texto que me envió Silvia, una lectora del blog, a raíz del post que escribí sobre meditación Vipassana. En él nos cuenta su experiencia en el taller de 10 días al que asistió en Toledo.
Espero que te guste 🙂
***
Es increíble el funcionamiento de la mente….
Cuando estaba aprendiendo la técnica de meditación Vipassana, mi mente, distraída como de costumbre, no paraba de pensar y pensar…
Eran tan increíbles algunas de las sensaciones que viví allí mientras meditaba, que no paraba de escribir posts en mi “blog mental” (En esos diez días no se puede hablar, leer, ni escribir).
Normalmente esto ocurría cuando me acostaba e intentaba dormir, y ahora resulta que han pasado ya DOS MESES y hasta ahora no he encontrado el momento de contar mis experiencias de meditación en Vipassana.
Por un lado, al hacerlo así, olvidas detalles que en otro momento hubieras contado, y por otro lado no está mal, ya que cuento una experiencia desde otra perspectiva más lejana al curso, pues cuando sales, tu estado mental es realmente MARAVILLOSO…Maravilloso….de autentica paz y conexión con el Universo…. Puede parecer hasta irreal. Pero en contacto con el mundo exterior y sus “contaminaciones mentales ” vas perdiendo parte de ese estado vibratorio tan intenso, ya que las condiciones que se dan en los retiros nada tiene que ver con las que tenemos en el exterior y nos enfrentamos día a día, con todas las obligaciones y circunstancias que nos rodean.
No digo que no se pueda conseguir, sólo es mi experiencia, como todo lo que escribo sobre ella en este post, y es lógico que así sea porque soy una principiante.
Un buen meditador experimentado es imperturbable a las condiciones exteriores….
Ayer me llamó Isabel, compañera de viaje y de habitación (éramos 9 durmiendo en el mismo habitáculo) y después de hablar con ella, me han entrado muchas ganas de nuevo de contar mi experiencia y de ponerme más seria con la meditación, porque el mogollón del día hace que no le dedique el tiempo necesario para avanzar en el Dhamma…
Llevaba TRES MESES en lista de espera para hacer el retiro en Chueca (Toledo) y había planificado mis vacaciones en torno a la posibilidad de ir, pues agosto es el único mes que podía hacerlo…
Había leído unas cuantas experiencias en blogs, visto varios videos, y me cuesta describir la emoción que experimentaba al pensar cómo lo viviría yo cuando lo hiciera, pues TODAS, TODAS, TODAS, TODAS, las experiencias que había leído, o visto en YouTube eran positivas… MUY DURAS, eso sí…. Pero con un resultado final POSITIVO SIEMPRE.
Reconozco que eso me creaba un poco de recelo, pues me parecía extraño que con los gustos y percepciones tan distintas que tenemos los millones de personas en el mundo, justo yo encontré las que hablaban maravillas de esta técnica … En todas las experiencias que leí, hasta el más escéptico reconocía la utilidad de la técnica si la practicas…
Dicen que la casualidad no existe… quien sabe si fue por eso que las encontré…
Y no sabría explicar porqué… pero sentía que tenía que hacerlo, que me iba a venir bien en mi vida general (y así ha sido)
Justo dos días antes de que empezara el curso, me llamaron para confirmar mi plaza. Fue como si hubiera estado en paro y me hubieran dicho que me daban un trabajo, o de no tener coche que me regalaban uno….
Quizás parezca exagerado, especialmente para quien se encuentre en estas circunstancias, y sé que no es comparable, pero para mí la alegría y la emoción era similar a un deseo de ese tipo, y eso que intentaba no crearme demasiadas expectativas, para que no me afectara si no me llamaban, aunque reconozco que en el fondo intuía que me iban a llamar. Aún así no dejaba de ser un interrogante…
En cuanto me confirmaron plaza me puse en contacto con Isabel, Javier y Juan Carlos, tres personas absolutamente desconocidas para mí en ese momento, que solicitaban plaza para ir en coche desde Sevilla a Toledo. Y así tuve la suerte de encontrar a personas muy agradables y de lo más normales, que hicieron el viaje más entretenido, que siempre enriquecen un poco tu vida, y sé, volveré a ver en algún momento de mi vida…
Además tuvimos la suerte que Javier ya hubiera hecho un curso de 10 días 5 meses atrás, y además en el Dhamma Neru de Barcelona. Ahora quería afianzarse en la técnica, así que durante el viaje compartió con nosotros su experiencia.
Eso siempre viene bien para ir más preparado y entender mejor todo… pues aunque hay mucha información en la web sobre las características generales de la técnica y sus beneficios, no hay tanta respecto a las dudas “logísticas” que te surgen antes de ir por primera vez….
¿Dónde dormiré? ¿Cómo nos organizamos para ducharnos si no podemos hablar? ¿Tenemos alguna percha donde colgar la ropa? ¿Qué pasa si me duele algo tanto que no puedo aguantar? ¿Cada cuanto tiempo hay un descanso? ¿Qué pasa si necesito ir al baño mientras estoy meditando? ¿Hay una ropa para meditación especial que no me he llevado? ¿Será realmente apropiada o cómoda para meditar la ropa que llevo? ¿Cómo se elabora la comida? ¿Cómo te despiertas si estás profundamente dormida? Etc, etc.
Todavía me fata mucho que aprender, entender y avanzar…Se compara el hacer un primer curso a estar en el jardín de infancia J), pues el sendero es largo y practicar es absolutamente fundamental para obtener óptimos resultados de esta técnica.
Llegamos sobre las 5 de la tarde, rellenamos las hojas de inscripción y subimos a las habitaciones (PRIMERA RECOMENDACIÓN…. Nada de llevar una maleta enorme…por si acaso. Si es verano la ropa se lava a mano y se seca en muy poco tiempo, no hace falta tanta ropa…. A mi me dio vergüenza la maleta tan grande que llevaba cuando vi lo que llevaban los demás…. Y eso que todo era ropa cómoda, nada arreglada, pero en la web oficial te dicen que lleves ropa suficiente porque no puedes lavar más que prendas “pequeñas”)
Después nos dieron una charla general sobre la meditación y las normas, una cena ligera donde todavía podíamos hablar, y una vez nos metimos en la sala de meditación empezó el NOBLE SILENCIO….silencio 24 horas durante 9 días, a excepción de los 5 minutos del medio día si querías preguntarle algo al profesor en privado, o las veces que te llamaba cada dos días para ver cómo ibas con la técnica.
También a las servidoras alguna pregunta sobre la comida, cuando no sabías qué era, donde estaban las servilletas, etc.…. lo minino de lo mínimo, muy discretamente siempre para no molestar…y por supuesto solamente a las personas designadas para ello…
Si tenías alguna duda sobre la técnica y le preguntabas algo a la manager, te decía que no podía contestar y que te apuntaras en el tablón para preguntarle a la profesora. Tienen órdenes expresas de hacerlo así, con lo que a veces te encontrabas con algunas dudas que te surgían a lo largo de las horas de meditación y después de unas horas más meditando, eran contestadas por ti mismo… otras veces no, claro…
(Las mujeres sólo podíamos dirigirnos a ella para cualquier problema logístico o a las servidoras cualquier problema sobre la comida. Y los hombres al manager de hombres)
Al salir del curso muchas personas comentábamos que era una pena que las preguntas de la noche, las que se podían hacer sobre las 9 y media, después de la última meditación que había tras la charla, no se hicieran en voz alta, ya que podían haber despejado muchas dudas similares que teníamos todos, y enriquecernos. Pero las normas son así… imagino que tendrá su explicación….
Nuestros profesores en esta “sentada”, como entendí que suelen llamar a estos 10 días cuando haces el curso como alumno y no como servidor, eran americanos, así que la manager nos traducía a los que no hablamos un inglés fluido.
Nos separaban hombres de mujeres para evitar al máximo las distracciones.
Dicen que después de mucho observar a lo largo de los cursos, han visto que es lo que mejor resultado da. Así que tanto el comedor (es gracioso, porque ves los pies aunque no les veas la cara, ya que estamos separados por mamparas) como en las habitaciones y baños, tenemos instalaciones adaptadas para no encontrarnos, incluso en el trozo de jardín por el que pasear.
En el único sitio que coincidimos es en la sala de meditación, aunque eso sí, nos separan a un lado chicas y a otro chicos, y los managers vigilan frecuentemente para que no haya ningún tipo de comunicación entre meditadores.
Cada uno tenemos nuestros sitios asignados, siempre el mismo.
Los que han hecho más cursos están delante, los que somos más nuevos estamos más atrás, y los que necesitamos silla por problemas de espalda como ha sido mi caso, o cualquier otro motivo, normalmente también estamos atrás del todo (sólo un 10% en silla, el resto en cojines… donde no lo soportaría hoy por hoy. No tengo forma física, para mí sería la muerte a pellizcos….). Éramos 100 personas.
Hay 5 preceptos que hay que cumplir inexorablemente para poder hacer el curso y son parte fundamental en el código de disciplina para esos 10 días:
- Abstenerse de matar a cualquier criatura (no hacer daño a nadie, aquí está implícito el hecho de no comer animales porque de este modo contribuirías a su muerte por eso la comida es vegetariana)
- Abstenerse de robar (obvio, es un daño a alguien)
- Abstenerse de toda actividad sexual (hay que estar al 100% en la técnica para no distraerse ni distraer a nadie, esto extrapolado a la vida diaria sería no mantener relaciones sexuales ilícitas en el sentido de hacer algo no acordado por la pareja que pueda dañar al otro…)
- Abstenerse de mentir (con el noble silencio esto es imposible, al menos a los demás)
- Abstenerse de todo tipo de intoxicantes (que pueden alterar nuestro estado mental natural)
Eso los estudiantes nuevos, claro, porque los antiguos tienen 3 códigos más de disciplina.
En general hay que abstenerse de cualquier cosa que pudiera perjudicar a otro o a ti mismo… Esto hace que la mente esté serena y pueda aprenderse y practicarse correctamente la técnica.
Y por supuesto TOTAL SILENCIO…. NOBLE SILENCIO…. Silencio de cuerpo (comunicación no verbal), palabra, y mente (el silencio más difícil)…
Desde el día 1 hasta el día 9 esto es así porque cuando hablas con alguien es muy difícil no pensar en cualquier momento sobre la conversación que has tenido… Esto distraería a la mente y nos haría no aprovechar correctamente la técnica.
Además, cuando no hablas o no te hablan, es más difícil juzgar a los demás y por lo tanto, llegado el caso, la posibilidad de acumular negatividades y distraerte es menor…
¿Y por qué hasta el día 9 y no los 10 días? Por lo que me comentó el último día una alumna que ya había hecho 10 cursos (no diez días), al principio se hizo así y hubo varios accidentes de tráfico porque se pasaba de un estado mental silencioso de varios días, al mundanal ruido, con las consiguientes alteraciones sensoriales, así que a partir de entonces se hace de este modo, para ir aclimatando a la mente al ruido exterior. De hecho, a mí me resultó curioso observar cómo me mareaba durante los primeros minutos en los que ya podía hablar… Parecía que me hubiera tomado 3 cervezas.
Nos levantábamos todos los días a las 4 de la mañana con el dong. A las 4 y media empezábamos la primera meditación de la mañana que podía ser en la sala o en la habitación (altamente aconsejable en la sala para no quedarse dormido).
De 6 y media a 8 desayunábamos (toda la comida es vegetariana, pero había preparado de soja, y cola Cao, yo me decantaba por pan con aceite, sal y tomate, y si le pones encima “gomasio” que es una mezcla de sésamo y sal, está muy bueno)
De 11 a 12 h. comíamos (yo casi siempre ensaladas, las comía muy despacio y con los ojos cerrados para saborearlas bien y no distraerme mirando a nadie.
Algunos días había postres caseros a veces muy buenos, pero limitados a uno por persona, el resto es buffet libre, con las limitaciones evidentes de comida y consideración al resto para que llegue a todos).
Y hasta la una, descanso o entrevistas si te habías apuntado en el panel a lo largo de la mañana.
De 5 a 6 merienda, última comida del día (soja y fruta los nuevos y sólo zumo de limón o infusiones los antiguos que no comen desde las 12 del mediodía hasta el desayuno del día siguiente).
Después cada uno lava su plato, vaso y cubiertos, poniéndote en la cola donde hay un cubo de basura para tirar restos, una cubeta para el prelavado, otra para enjabonado, y la última para aclarado, con los consiguientes trapos de secado que si llegabas de las últimas ya estaban mojados, luego cada cubierto a su sitio y chim pum.
A pesar de lo comilona que soy, iba tan mentalizada que apenas pasé hambre y la comida no supuso para mi absolutamente ningún sufrimiento ni sacrificio.
Comía poco adrede, porque si comía más me costaba más meditar, además por poco que comas hay que tener en cuenta que es suficiente porque pasas ¡¡ DIEZ HORAS Y MEDIA!! Meditando, sin moverte, y eso quema pocas calorías…. J)
Las diez horas y media son un cálculo aproximado quitando ya las comidas, los descansos largos y los cortos de 5 o 10 minutos que teñíamos cada hora.
Perdí bastante la noción del tiempo, no llevaba reloj, pero creo que después de las 4 meditaciones OBLIGATORIAS EN GRUPO , las otras eran opcionales en sala o en la habitación, previo permiso del profesor, y normalmente se iban los que no les tocaba reunión con el profesor para ver la evolución en la técnicas, que como dije antes era cada dos días aproximadamente, (creo que era un día a antiguos alumnos y otro día a nuevos alumnos, nos llamaban de 5 en 5 o de 6 en 6)
Las meditaciones obligatorias EN GRUPO eran a las 8 a 9 de la mañana, de 14:30 a 15:30, de 6 a 7 de la tarde, y de 8 y cuarto de la tarde a 9.
De 7 a 8 y cuarto hay charlas de Goenka (cintas grabadas, como las guías de meditación de cada hora, aunque siempre asistidas por un profesor) traducidas y escuchadas en nuestra lengua materna, con lo cual, meditadores extranjeros escuchaban estas charlas en otras salas, en su idioma.
Estas charlas eran muy esclarecedoras y entretenidas, pues además de explicar más profundamente la técnica y contar de manera aproximada cómo te ibas sintiendo cada día, conforme iban pasando los días y te adentrabas en la técnica. Contaba muchas parábolas que te hacían entender de forma sencilla y gráfica el significado de lo que te estaban enseñando…
A partir del día 6 creo recordar, en las horas de meditación en grupo se practicaba la FIRME DETERMINACIÓN (adhitthana) que se trata de no moverse en la medida de lo posible DURANTE LA HORA ENTERA por mucho que te duela el cuerpo o tu mente se distraiga. De este modo es como gravar a fuego en tu experiencia vital lo que supone la IMPERMANENCIA…(anicca: surgir y desaparecer) En el minuto 30 puedes estar con unos dolores increíbles, y al minuto siguiente ya no te duele nada y una sensación de bienestar y paz interior, es sustituida por esos dolores que parecían insoportables y que si no llega a ser porque pones en práctica la ECUANIMIDAD, nos hubiera costado tanto aguantar.
Tengo que añadir que hay que diferenciar el dolor por permanecer varios minutos sin moverte, que se pasa en cuanto te levantas y andas un poco, y el dolor causado por una lesión y que puede agravarse con una mala postura, que no hay que dejar de tratarse, y en ese hora, permitir ciertos movimientos si es necesario…(en teoría cualquier movimiento durante esa hora de firme determinación, justificado por alguna lesión o problema de salud debe ser autorizado por el profesor)
Los tres primeros días era solamente ANAPANNA, observar sólo y únicamente la respiración, todavía no nos habían enseñado la técnica de meditación Vipassana, pero ya aquí descubres lo distraída y agitada que es nuestra mente, lo difícil que es acallarla, y lo fácil que resulta pasar de un pensamiento a otro sin ningún control…. Vienen sobre todo a la mente pensamientos de expectaciones o del pasado, pero pocas veces la mente es capaz de centrarse en la respiración, observarla, y solamente estar en el AQUÍ Y AHORA observando la inspiración y la expiración….
Esos tres días de Anapanna, hay que centrar toda la observación en el triángulo de la nariz, ver cómo entra y ver cómo sale… nada más… y nada menos porque algo tan sencillo en apariencia, es muy complicado por la tendencia natural de la mente a estar en el pasado, el futuro o agitarse porque algo no le gusta…
Al segundo o tercer día ya te centras sólo en la respiración a la altura de los orificios de la nariz y el labio superior, con lo que el área de observación se hace más pequeño y las sensaciones son más sutiles.
No estaba acostumbrada a meditar, la única vez que había meditado en mi vida, antes de ir al curso de Vipassana fue en el centro de Siddha Yoga de Jerez de la frontera, y puedo decir que esa meditación fue decisiva para mí. Fue “mágica”.
Desde el principio tuve una paz mental increíble y poco común en una novata como yo que practica su primera meditación.
No pensaba en NADA EN ABSOLUTO, trabajo, novio, familia, perros, obligaciones pendientes… ¡nada! Y las pocas veces que me venían flases y pensaba en algo era todo en torno a la meditación Vipassana. Pensaba “que bien, estoy consiguiendo no pensar en nada, seguro que soy capaz de meditar todas esas horas” y cosas así…
Una vez terminé el curso me di cuenta que en esa media hora de meditación en Jerez, conseguí un estado mental que en el curso de Vipassana me costó muchos días conseguir, ya metida en la técnica que se da a partir del cuarto día.
Cuando le comentaba a una compañera que había sido la suerte del principiante, ella me decía que no, que seguro que en otras vidas había meditado ya.
Sé que suena raro eso de “otras vidas” para el que no crea en ello, y es de las pocas creencias en la práctica de la técnica que forman parte de la tradición budista cuando hablan de los tsankaras, acumulaciones a lo largo de estas y otras vidas, que físicamente se presentan como dolores muy diferentes, a veces no experimentados anteriormente, y teóricamente son antiguos conflictos traumáticos arraigados en lo más profundo de nuestra mente, que van saliendo a la superficie a medida que avanzamos en la practica de la técnica…
O sea, tú piensas que es un dolor articular, del sistema nervioso, etc., por la postura.… ¡pero es un Tsankara! O simplemente se manifiestan a través de este tipo de dolor. Y puede que sientas alguno de estos sankaras en Vipassana.
El resto es pura EXPERIENCIA… Observar y practicar… observar y practicar… ¿qué hay más natural y científico que el hecho indiscutible que respiramos y para ello inspiramos y expiramos?
Antes de ir al curso me encontraba dentro de las personas que temen que en algo tan aparentemente estupendo pueda haber sectarismos de algún tipo o intereses económicos… ¡TRANQUILOS! …. ¡¡¡ES LA ANTI SECTA!!!
Te enseñan sobre todo a observar y a razonar a través de la experiencia, no intelectualizando las cosas y creyéndotelas porque tienes fe.
Te dicen que no creas nada que no experimentes, ni aunque lo diga el Buda, pues eso seria la experiencia del Buda no la tuya.
Pero hay que darle la oportunidad a la técnica para comprobar que funciona y que es realmente una ayuda muy interesante para LIBERARNOS DEL SUFRIMIENTO.
Además parte de una premisa muy importante para mi… Cualquier cosa que hagas tiene que ser buena par ti y BUENA PARA LOS DEMÁS. Si lo que haces beneficia a unos pero perjudica a otros no es una buena técnica…
Se imparte de forma gratuita, y al final del curso, o en otro momento, puedes dar un donativo que será utilizado para que otros alumnos puedan seguir aprendiendo la técnica. Hay que pensar, que hay unos gastos evidentes de comida, alojamiento, electricidad y agua. Si has podido hacer el curso es porque antiguos meditadores han dado ese donativo con la intención de que otros se beneficien de la técnica …
Todo lo que te dan es para que hagas el curso sin tener que preocuparte de nada y lo aceptas con humildad y consciente de que estas viviendo de la caridad esos días, al igual que tu donativo no es para pagar nada de lo que te han dado, sino con intención de beneficiar a otros que lo podrán hacer en un futuro.
Así que cada uno da lo que buenamente puede y quiere según sus circunstancias económicas, y esto no influye en absoluto en un sentido o en otro, para que seas recibido en futuros cursos con ningún tipo de preferencias. Si no se entiende esto, se está perdiendo una de las grandes esencias del Dhamma.
Dicen que el primer día es uno de los peores, pero yo lo lleve relativamente bien, aunque los dolores de cervicales se estaban agudizando cada vez más y necesitaba subir a la habitación los 5 minutos que teníamos cada hora para tumbarme y ponerme un pañuelo enroscado en la nuca … Eso era lo único que me hacía soportar el dolor una hora más…. La espalda no me dolía, estaba en una silla e intentaba mantener la espalda recta en todo momento, pero el cuello no paraba de crujirme…
Al segundo día tuve mi primera “crisis”.
En ningún momento se me ocurrió tan siquiera la posibilidad de irme, ya sabía a lo que iba, sabía que iba a ser duro, que probablemente me dolería todo, pero también estaba convencida de que se me pasaría (anicca… todo lo que surge desaparece, es la ley natural de la permanencia)
Aun así la sensación de agobio y de tener ganas de llorar cada vez era más fuerte, y llegó un momento que me salí de la sala de meditación porque necesitaba irme a llorar un rato al baño, sólo 5 minutos…el motivo… el dolor físico… No volvió a pasarme hasta el cuarto día…. Pero esta vez no fue por dolor físico, sino emocional, sensación de impotencia y sensación de fracaso, pues no conseguía concentrarme….Esa fue la última vez que sentí algo así, pues a partir del cuarto día repiten hasta la saciedad una palabra… ECUANIMIDAD.
Ese cuarto día, cuando nos llamó la profesora para preguntarnos si estábamos manteniendo la ecuanimidad, le dije que no… que me había agobiado mucho porque no conseguía observar mis sensaciones sin que mi mente se distrajera, estaba contrariada y con sensación de no poder conseguirlo, pero ella me miró con dulzura y con una gran serenidad y sonrisa, transmitiéndome mucha tranquilidad con unas simples palabras, que aunque simples, me llegaron bastante…. NO PASA NADA…. ES TU REALIDAD ACTUAL, ACEPTALO… No pasa nada… vas bien…
Y así es como conseguí cambiar el chip y darme cuenta de lo importante que es la archifamosa ECUANIMIDAD…. Pues mantenerla es mucho más importante que las sensaciones mismas… aunque la observación de estas son fundamentales para aprender y avanzar en la técnica.
Cuando me empezaba a agobiar simplemente respiraba hondo y recordaba sus palabras… luego me tranquilizada y seguía meditando.
Meditaba aceptando que la realidad de cada momento es diferente (anicca), que tal y como te dicen tanto y tanto, TODO LO QUE SURGE, DESAPARECE (anicca), tanto las sensaciones positivas como las negativas.
Nada es eterno y este es el motivo por el cual es tan importante ACEPTAR LAS COSAS TAL Y COMO SON, NO COMO NOS GUSTARIA QUE FUERAN. (algo así como “yataaaaaa butaaaaaaaaa”)
A partir del cuarto día se empieza a practicar Vipassana. Se empieza sintiendo cualquier parte del cuerpo, sin visualizar, empezando por el eje central de la cabeza, siguiendo un orden de arriba abajo… pasando por el mayor número de zonas posibles dentro de la división de las zonas….No hay que buscar sensaciones, tan sólo OBSERVARLAS.
Las sensaciones pueden ser muchas, calor, frío, dolor, picor, vibración, etc.… tantas como sensaciones sea capaz de detectar una persona.
Sensaciones que pueden ser sutiles o burdas. Cada uno siente las suyas, y no hay que etiquetarlas si no sabes definirlas, tan sólo sentirlas, y cuando las sientes pasas a otra zona sin pararte en ellas, para evitar tener avidez cuando la sensación es agradable, o aversión cuando es desagradable….
Nos dicen que las causas principales de sufrimiento son la AVIDEZ, LA AVERSIÓN Y LA IGNORANCIA…
Si conseguimos mantener la ecuanimidad en cualquiera de estas situaciones, evitaremos en gran medida EL SUFRIMIENTO.
Que observas las sensaciones viajando de arriba abajo pero de repente las sientes en el lado contrario… ¡no pasa nada!.. Sigue observando de arriba abajo, sin hacer caso a esa otra sensación más burda que se ha manifestado en ese momento… pero siempre sin perder la ecuanimidad…. Practicando incansablemente….
Al principio me costaba mucho entender esto, pues me daba la sensación de que tenía que renunciar a cualquier sensación positiva para mantener esa ecuanimidad.
Para mí era como convertirte en una autómata para no sufrir. Pero no se trata de eso, se trata de no tener AVIDEZ (deseo algo que no tengo, material o a nivel de sensaciones, deseo algo que no me pasa, deseo que algo bueno que me pasa o que tengo dure para siempre, etc.… Y como no siempre ocurre así como es evidente…. SUFRO) y AVERSIÓN (No me pasa lo que quiero que me pase, Rechazo lo que me está pasando, Tengo cosas o sensaciones que no me gustan, No acepto que las cosas son como son… luego… SUFRO)
Cuando ese día le pregunté a la profesora sobre esta cuestión, me dijo que no, que disfrutar de las cosas está bien, tienes una buena sensación, la disfrutas… es la realidad de tu momento. El problema es cuando quieres que esa sensación dure siempre y es entonces cuando interviene la AVIDEZ, con lo cual viene el sufrimiento, porque entonces ya no la tienes, y en vez de pensar, vale, la he vivido, la he disfrutado y como todo lo que surge desaparece, ahora ya no está, punto, no pasa nada, es la ley de la naturaleza…
En vez de pensar eso, piensas que quieres seguir viviendo esa sensación maravillosa…. Y es cuando sufres por no poder vivir las cosas que quieres de forma constante.
Creo que es fácil mal interpretar esto porque cuando nos empiezan a enseñar meditación Vipassana LA TÉCNICA, nos dicen mucho que no nos paremos en las sensaciones tanto si son agradables como desagradables, y esto tendemos a extrapolarlo a las sensaciones de la vida exterior fielmente y a imaginarnos cómo sería una vida sin disfrutar de las sensaciones agradables sólo por no sufrir. Y no es eso.( deduzco por las palabras de la profesora), pero cuando escucho las cintas de las charlas de la tarde de Goenka, sigo teniendo la impresión de que fuera algo a aplicar en la vida diaria, me refiero, no sólo al practicar la meditación esas dos horas al día, sino en cualquier momento de tu vida.
Este será un punto a aclarar por algún maestro, les escribiré para preguntarles quien es mi maestro asistente en estos casos…O si alguien experimentado y preparado tiene certeza de ello y está leyendo esto que me lo explique si le parece bien.
Después de un día entero observando sensaciones de arriba abajo, empezamos a observar de los pies a la cabeza… y de nuevo de la cabeza a los pies….
¡Qué difícil me resultó seguir el orden! Pues a partir del quinto día me costaba mucho dormir por la noche.
Era como estar en un estado de continua vigilia en el que me despertaba a veces a modo de pesadilla diciéndome a mí misma que dejara de meditar, que eran horas de dormir… con lo cual en horas de meditación el sueño era mi gran enemigo, me vencía continuamente.
Indudablemente ha sido con diferencia lo peor para mí en este curso, lo más incontrolable, pues cuando te duermes pierdes la conciencia y tienes que empezar de nuevo una y otra vez… una y otra vez…. Con la diferencia que en otro momento me hubiera desesperado y me hubiera echado a llorar y en esta ocasión ponía en práctica mi ecuanimidad y aceptaba que esa era la realidad de mi momento y que no pasaba nada, que con paciencia y persistencia lo acabaría consiguiendo….
Es algo que repiten continuamente durante las meditaciones….
CON PACIENCIA, DILIGENCIA, PERSISTENCIA E INTELIGENCIA…lo lograreis… SEGURO LO LOGRAREIS
Las sensaciones más curiosas que tuve, fue un día muy temprano, esperando a que dieran el aviso para entrar en la sala de meditación, empecé a sentir la vibración en todo mi cuerpo, pero no sólo la sentía… también la oía… Era tan increíble que pensé que tenía que tener alguna explicación científica…. Los cables de debajo del suelo o algo similar, pero lo cierto es que nunca antes en ninguna circunstancia había sentido algo similar…. O como otro día sentía electricidad desde mis pies hasta mis piernas, no era un fluido libre porque se paraba ahí… pero la primera vez no pude evitar desear con avidez que la sensación durara más porque era algo completamente desconocido…Otra vez sentí como la sangre pasaba por mis venas… Son sensaciones que realmente cualquiera puede sentir si se está en el ambiente adecuado con la mente calmada y atenta y se dan las circunstancias, pero realmente para mí fueron excepcionales, pues la mayoría de las sensaciones que tenía eran cosquilleos, pinchazos, palpitaciones, etc…
Un día también me pasó algo curioso que no se si podría interpretarse como un sankara, y fue al acostarme. Estaba intentando dormirme y de repente sentí una fuerte convulsión y una luz muy fuerte… era como si mis rodillas y mis codos se contrajeran y se tocaran en posición fetal a la vez que una luz lo inundaba todo… No me dio miedo ni me pareció agradable ni desagradable… simplemente me llamó la atención…
En el día a día, además de meditar una hora por la mañana y una hora por la tarde (lo ideal aunque no es fácil) si te estableces en Sila (moralidad) , Samadhi (concentración, plena conciencia), pañña (sabiduría) sin importar a cual religión pernetezcas, eres una persona buena, liberada (de todo lo que ocasiona sufrimiento) y piadosa; contribuirás a la mejora del mundo, pues buenas personas crean una buena sociedad.
En resumen…. Ha sido una experiencia única.
La considero una de las mejores inversiones de mi vida, aunque tenga que mejorar mucho en mis hábitos meditativos, pero sin lugar a dudas soy una persona un poquito mejor después de aprender la técnica, y poner en práctica, no sólo la técnica meditativa, sino la esencia de la meditación.
ehi-passiko (¡es tan maravilloso! ¡todos deberían probarlo!)
Respecto a algunos los mis interrogantes que tenía antes de llegar, diré que dormí en una cama que hacía un ruido infernal (el último día descubrimos que le faltaban varias láminas), pero que me brindaron con mucho cariño, Nos duchábamos conforme nos íbamos levantando unas, y otras a lo largo de los descansos del día según preferencias o costumbres… increíblemente con un respeto y una coordinación que dudo hubiéramos conseguido de haber podido hablar.
Personalmente recomiendo la ducha de las 4 de la mañana porque ayuda a despertarte. Mejor tener todo preparado el día anterior para molestar lo menos posible, e ir a las duchas de abajo en caso de hacerlo en Chueca (no sé cómo es en otros sitios) , a la que es de chicos pero esos días las utilizamos las chicas porque son las que están más vacías y hay menos saturación ya que al ver la figura del chico, automáticamente tendemos a evitar.
Recomiendo llevarse chanclas para la ducha, y un neceser de esos que se cuelgan como en una percha porque hay muy poco espacio y es lo más cómodo a la hora de tener todo a mano mientras te duchas. También recomiendo si es verano y se va a lavar la ropa, llevar jabón para lavado de ropa, zapatillas de esas como de goma que no hacen ruido y son muy cómodas de poner y quitar (también las hay forradas para invierno), llevarse tapones para los oídos por si alguien ronca o simplemente se necesita más silencio para meditar, un antifaz para que moleste menos la luz en los descansos del día, alguna estola porque a veces meditando viene bien, una botella buena donde poder rellenar el agua (a mi me salieron boqueras de utilizar la de plástico corriente de un solo uso, varios días seguidos)
Y si, hay perchas donde colgar la ropa, aunque pocas, y compartes un trozo equivalente a una hoja de armario normalita entre dos. También recomiendo para tenerlo todo a mano esas cosas plegables que se enganchan en las barras de los armarios para colocar la ropa de forma ordenada.
Albornoz de microfibra que se seca antes, toalla para el pelo, secador si es invierno, y cremas para las arrugas (entre eso y que no gesticulamos en 10 días, me echaron 29 años justo al salir. Definitivamente la paz interior es un elíxir de juventud)
El dong te despierta suave pero firmemente, y a los 5 minutos lo vuelven a repetir, al igual que poco antes de empezar la meditación…
Seguro que se me olvidan muchas cosas, pero ya irán saliendo
ACLARACION IMPORTANTE: Cualquier descripción de la técnica es únicamente mi percepción de ella y por tanto mi propia experiencia. Bajo ningún concepto pretende enseñar nada a nadie (si crear curiosidad en ella), pues siempre debe ser una técnica enseñada por un profesor debidamente formado al que se le pueda preguntar cualquier duda a lo largo de la práctica…
¡¡¡¡¡¡¡Bhavatu sabba mangalam!!!!!
(¡¡QUE TODOS LOS SERES SEAN FELICES!!!)