Este fin de semana, un lector me contó por Skype que, después de dejar su último trabajo, se estuvo planteando si debía irse a viajar durante una temporada o buscar otro empleo para adquirir más experiencia como programador. Al final acabó decidiéndose por la segunda opción.
– «¿Y por qué no hiciste las dos cosas?» –le pregunté.
– «Hmmmm, pues no lo había pensado, pero ahora que lo dices…»
La realidad es que viajar y programar son actividades compatibles, no hay por qué elegir solo una de ellas. Puedes llevarte tu portátil a (casi) cualquier ciudad del mundo, buscar una cafetería agradable con Internet y trabajar en tu aplicación de iPhone o en el proyecto de tu compañía mientras disfrutas de un delicioso capuccino. Sin embargo, mi amigo no se había dado cuenta de esto porque desde el primer momento creía que estaba obligado a elegir.
Me he dado cuenta de que el patrón «A o B» está MUY presente en nuestras vidas. Y no sólo en términos de acciones, sino también de creencias. Seguramente te sientas identificado con alguna de estas maneras de pensar:
- Viajar o tener pareja
- Aprender un idioma o trabajar
- Hacer deporte o tiener tiempo para estar con tu familia
- Ganar mucho dinero o hacer lo que te gusta
- Votar al PSOE o ser católico
- Ser rico o ser buena persona
Afortunadamente, en la mayoría de ocasiones se trata de falsas disyuntivas basadas en prejuicios o falsas creencias, y en realidad las dos opciones son compatibles.
Por eso, la próxima vez que tengas que elegir entre A o B te animo a que seas creativo y consideres una tercera opción: A y B. Puedes…
- Viajar CON tu pareja
- Aprender un idioma MIENTRAS trabajas
- Hacer deporte CON tu familia
- Ganar mucho dinero HACIENDO lo que te gusta
- Votar al PSOE Y ser católico
- Ser rico Y ser buena persona
No siempre hay que escoger A o B, ya que esas 2 opciones en una gran mayoría de los casos con complementarias.
Pruébalo y cuéntanos los resultados en los comentarios 🙂
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La foto es de un monje en barca en el pueblo flotante de Tonle Seap, Cambodia. Como veis, se puede ser monje Y montar en barca.
El pasado lunes, Ana Gragera y Antonio León me entrevistaron en El sol sale por el oeste de Radio Extremadura. Puedes escuchar la entrevista aquí. Muchísimas gracias a los dos por invitarme al programa, a Guadalupe Fernández por escribir sobre mi y darme a conocer, a su novio Antonio por recomendarme, y a todos los que me leeis cada semana por vuestras palabras de apoyo y por estar ahí.
Ya me he leído El método Lean Startup y he empezado a trabajar en el resumen. Escribirlo me está costando más de lo que creía, porque no tengo muy claro cuál es el mejor formato…
Jmalonda dice
Mierda, con este post te me has adelantado. 🙂
DonEloy dice
Puedes viajar por China Y escuchar El tratamiento Regio del maestro Tote King.
https://soundcloud.com/sonymusicspain/sets/ep-toteking-el-tratamiento
Angel dice
Llevo ya un par de días escuchándolo 🙂
Miguel dice
Hola. Me llamo Miguel. Hoy he descubierto este blog y me ha gustado bastante. Me siento identificado con la filosofia que trasmites, y me parece honesta. Creo que tener sinceridad/humildad con uno mismo es importante, sobre todo para vencer miedos, trabas personales (yo he pasado por eso y aún me queda) y sentirse feliz o realizado. Lo del inglés es verdad sobre todo a la hora de leer libros, por la traducción y contenidos que no llegan en español. Resumiendo para no extenderme: enhorabuena.
Un saludo.
Angel dice
Hola Miguel!
Bienvenido a la comunidad y muchas gracias por tus palabras 🙂 Por si no lo sabías, puedes compartir cualquier aporte que tengas aquí.
Seguimos en contacto!
Un abrazo!
Jorge dice
He leído algunas entradas, entre ellas la que tiene que ver con la felicidad y me ha gustado bastante Ángel :P. Al leer que el pasado lunes te entrevistaron supongo que ya no estarás por Roma, ya que cuando leí la entrada que te comentaba yo estaba en Cáceres y tú allí. ¡Lástima! Yo estoy de Erasmus allí, y mi hermano además ha venido a hacer un trabajillo de la uni hasta el día 17. Así que bueno, si vuelves por aquí avisa y te hago algún gireto turístico :P.
Recuerdos
Jorge (el hermano de Virgilio).
Pablo Domingo Montesinos dice
Ángel, acabo de escuchar la entrevista y está genial la ilusión que transmites.
Sigo en proceso, buscando mi fuente de ingresos pasivos. Mucho trabajo y, sobre todo, acción.
Enhorabuena y un saludo,
Pablo
arturo kortazar azpilikueta martikorena dice
No existe libertad más que la capacidad de elegir, y esta depende en su inmensa mayoría de los casos del dinero, jamás una persona que no tiene nada puede elegir algo válido y vendible en el mercado social y del sentimiento, ni decidir lo que le conviene, y si no puede elegir, ¿qué puede hacer en este sistema? Poca cosa, más que hacer actividades que son gratis, que las hay y son satisfactorias para el que pueda encontrarlas el punto, como hacer deporte, leer, escribir, pasear y conversar. Podemos también elegir sin coste, tener buenos hábitos alimentarios, ser generosos, no tener malas reacciones, tener buenas conexiones e ideas, tener buenas palabras… Tener una buena actitud. Todo lo demás cuesta y está materializado. Pero, ¿podrá ser la libertad, la de elegir entre esas miserias, entre esas desgracias y amenazas de la sociedad para la salud física y mental, la única de las posibles? Cuando se pierde la libertad la salud mental se tambalea.
La elección conlleva asimismo pérdida de libertad, algo paradójico ya que te impele a transigir y renunciar ante aquello que rechazas, pero París bien merece una misa, porque a la hora de elegir una entre varias opciones distintas, pierdes las demás sin remedio. Es como si todo estuviera del revés, y nos enseñaran a padecer la realidad, lejos de aprender a cambiarla, como si nos incitaran a olvidar el pasado en vez de asumirlo, asimilarlo, e interpretarlo y luego poder soportarlo, y nos impusieran a consentir un devenir incierto, en vez de imaginarlo y soñarlo.
Ahora bien, la libertad de elegir está fundamentada para mí en esas pequeñas tareas de la vida corriente, en la búsqueda sin pausa y sin excusas de la verdad, en la bondad y en la admirable apreciación y valoración de la belleza, no sólo en lo material como la mayoría de las personas hacen y creen. Si lo piensas bien, la única libertad posible y plena que existe para todos los ciudadanos, independientemente del dinero que tengan, es la capacidad de pensar como quieran y en lo que quieran, es algo que nadie les podrá arrebatar jamás mientras estén vivos. Lo que tienes dentro de tu mente es tuyo para siempre. Y nadie puede ser libre de verdad más que en su manera de vivir, en la posibilidad de orientar su voluntad hacia un deseo u objetivo sin ser coaccionado ni violentar la voluntad ajena, sobre la base de sus pensamientos para encontrar su propio camino.
Lo que está claro que plantearse una vida eligiendo por uno mismo, es mucho más dura y difícil que dejarse someter por los demás, como un barco al pairo que se le lleva el viento y la corriente. Pero hay que entender que para elegir bien, hay que eliminar lo superfluo, los hábitos y costumbres innecesarias, que lo único que sirven es para dar una falsa sensación de seguridad, que actúan como una prisión, y que son necesarias romper por la inclinación que nos incita a acomodarnos. Se requiere saber esperar, para descubrir cuál es el camino que debemos escoger sin precipitarnos, y elegir nuestras propias batallas, evitando tragar con las cuistas de otros que nos suelen imponer muchas veces sutilmente sin percatarnos de ello, porque cuando estamos cegados por la pasión, por la dependencia y por el sexo, no vemos claramente lo que nos conviene. A veces es mejor tener paz que no razón, las consecuencias de las decisiones son peores que eludir los problemas. De modo que sea imprescindible tener paciencia, tomarse el tiempo necesario para conocernos mejor a nosotros mismos y escuchar nuestro interior sin vanidad, y observar el transcurrir de las manillas del reloj como el mejor indicador de los cambios que nos van llegando, porque la serenidad es la clave fundamental para llegar al conocimiento, y renunciando a todo aquello que es baladí y que hemos dejado atrás, asi podremos después decidir libremente lo que más nos conviene, que es más complicado de saber. Eso sí, llegado el momento, decidirse pronto y con inteligencia, porque lo que se pierde no vuelve nunca más, y no estoy hablando de mi pelo jajaja.