Quiero cerrar esta mini-serie improvisada sobre el trabajo con un post aclaratorio sobre identidad y autoestima que creo que puede serte útil.
En mi último artículo, Virginia dejaba el siguiente comentario:
Gracias mil Angel, me ha encantado, me ha llegado, ha resonado.
Yo estoy en plena transición y por momentos sólo veo niebla alrededor. La última vez hace unos días escasos. Tremendo bache que llevó mi cuota de autoestima a unos rankings bajísimos.
Todo llega, todo pasa. Somos cambio y para conocer lo bueno hay que saber también caminar por lo aparentemente menos bueno. Todo es cuestión de actitud. Vendrán épocas de duda pero de ti dependerá de cómo las afrontes.
En mi caso, lo que he aprendido de estos días grises es que:
1. Valgo por lo que soy y no por lo que hago
2. No hay fracasos, sólo aprendizajes
3. Las expectativas que tengo me están impidiendo vivir el ahora
He salido fortalecida, con dudas aún, pero segura que es el camino por el que quiero transitar a pesar de lo difícil que pueda parecer. Por lo menos intentarlo para no arrepentirme luego de lo que nunca sucedió (no hay nostalgia peor, que añorar lo que nunca jamás sucedió dice el gran Sabina).
Gracias por tus palabras. Eres genial y te admiro muchísimo!!!
Y Teoma le respondía de esta manera:
Virginia, esa es la confusión de hoy en día, no vales por lo que eres, al contrario, vales por lo que haces.
Te imaginas que el encabezamiento de este blog fuera: Soy Ángel, natural de Cáceres, he dejado mi trabajo en una pescadería, porque mi ilusión es viajar por el mundo.
¿La admiración esa de la que hablas, la tienes por lo que ha hecho y que el 90% de las personas no lo haría, o por lo que es?
Vivimos en un mundo de aprobación, hasta que no te liberas de la aprobación de unos o de otros y te dedicas a la realización de ilusiones, sean cual sean y sin tener en cuenta la criba que supone la búsqueda de que alguien lo apruebe, nada te llenará.
***
¿Por qué a veces, como le pasó a Virginia, nuestra autoestima se desploma bruscamente? ¿Es cierto lo que dice Teoma de que hoy en día nos valoran sólo por lo que hacemos? ¿Es eso algo malo o erróneo? ¿Sería mejor valorar a la gente por lo que son?
Todas estas son preguntas tremendamente interesantes que estoy seguro que tú también te has hecho alguna vez. En mi caso, las tengo muy recientes a raíz del taller al que asistí hace un par de semanas y hoy me gustaría compartir contigo mi visión personal sobre el tema.
Lo que eres vs. Lo que haces
«¿Qué somos?»
Esta es una pregunta que los seres humanos llevamos haciéndonos desde el principio de los tiempos, y que a lo largo de la historia ha dado lugar a miles de libros y ensayos filosóficos. Se puede responder de muchas maneras y desde distintos puntos de vista (material, espiritual, psicológico, sociológico…), pero en este artículo quiero centrarme únicamente en lo más obvio.
Creo que coincidirás conmigo en que todos los seres humanos somos una combinación de lo siguiente:
- Cuerpo físico
- Pensamientos
- Emociones
Podemos utilizar otros nombres (por ejemplo, conciencia en vez de pensamientos) o ser más o menos granulares (dentro de pensamientos distinguir entre recuerdos, valores, creencias…), pero así a grandes rasgos y de forma muy simplificada estos serían los tres componentes que de una persona, o lo que es lo mismo, lo que eres.
Como puedes ver, en la lista no he incluido nuestras acciones, a pesar de que están íntimamente relacionadas con nuestro cuerpo, nuestros pensamientos y nuestras emociones. El motivo por el que he preferido ponerlas a parte, al menos por ahora, es que nuestras acciones no son exactamente una parte de lo que somos sino una expresión de ello. Lo que haces es una expresión de lo que eres en el momento en que tiene lugar la acción.
Y ahora que hemos hecho estas aclaraciones previas, podemos meternos en materia 🙂
¿Cuánto vales?
En su comentario, Teoma le decía a Virginia lo siguiente:
Te imaginas que el encabezamiento de este blog fuera: Soy Ángel, natural de Cáceres, y he dejado mi trabajo en una pescadería porque mi ilusión es viajar por el mundo.
¿La admiración esa de la que hablas, la tienes por lo que ha hecho y que el 90% de las personas no lo haría, o por lo que es?
Lógicamente, Virginia me admira por lo que hago, ya que es lo único que puede ver de mí (además de mi aspecto físico). No puede leerme los pensamientos, por lo que su imagen de mi tiene que venir obligatoriamente de mis acciones, que es la parte visible de estos.
Mis acciones en sí son completamente neutrales. Virginia las admira porque las ha juzgado en función de sus valores y el resultado ha sido positivo, pero hay gente con otros valores totalmente diferentes que piensan que soy un imbécil por dejar un trabajo fijo o que escribo mal porque no les gusta el estilo que utilizo.
Valorar a los demás por lo que hacen es perfectamente normal y sano, y algo que todos hacemos continuamente. En cuanto conocemos a alguien le asignamos mentalmente una valoración en función de la impresión que nos haya dado y de nuestros valores, y esa valoración va evolucionando a lo largo del tiempo según vamos observando su comportamiento y van cambiando las cualidades que consideramos importantes en los demás.
Aunque no lo parezca, este mecanismo de valoración es muy importante porque las relaciones interpersonales son siempre interesadas. Cuando interaccionamos con los demás siempre buscamos nuestro beneficio, y si no hay beneficio por ambas partes no hay relación (o la relación se vuelve disfuncional). El ser capaces de juzgar a los demás es lo que nos permite elegir con quién nos asociamos. Lo que sí que varía en las relaciones es el grado de interés, como puedes ver en el siguiente esquema:
Los círculos de fuera indican relaciones más condicionales y basadas en el interés
A un desconocido, por ejemplo, le valoras exclusivamente en función de lo que puede aportarte. Si estás buscando un empleado para tu empresa, vas a fijarte en el currículum de los candidatos porque representa lo que han hecho en los últimos años, y vas a contratar al que creas que va a hacer mejor su trabajo. O si acabas de conocer a alguien tendrás más o menos interés en invertir tiempo en ser su amigo en función de cómo te caiga, y él se comportará exactamente de la misma manera.
Con tus amigos es ligeramente diferente. Si algún día un colega te la lía no pasa nada, le perdonas. Como conoces a esa persona desde hace tiempo, has ido creando poco a poco una valoración positiva de ella en base a sus acciones que no desaparece tan fácilmente. Pero si la situación se repite una vez tras otra, al final se enfría la relación y te acabas buscando otro grupo de amigos.
En el siguiente círculo están tus hermanos. A un hermano se le pasa mucho más que a un amigo por el simple hecho de que es tu hermano. Cuando tu hermano la caga siempre le ayudas, incluso si ya le habías advertido de que no hiciese eso porque la iba a cagar y no se lo merece. Pero todo tiene un límite, y las relaciones entre hermanos también se acaban rompiendo. Tampoco puedes cargar con los errores de los otros toda la vida.
Luego vienen los padres. El amor de una madre por su hijo es prácticamente incondicional, independientemente de lo que haga el niño. A mí siempre me viene a la cabeza la imagen de la típica madre que defiende a su hijo a muerte en las reuniones del colegio, hasta el punto de tener una discusión fuerte con el profesor, a pesar de que no llevar ninguna razón. A un hijo se le quiere porque es tu hijo, y punto.
Y por último, en el centro del círculo, estás tú.
Hacia una autoestima incondicional
Igual que valoramos a los demás, también nos valoramos a nosotros mismos. La valoración que tenemos de nosotros mismos es lo que llamamos autoestima.
Algunos de nosotros, especialmente los que tenemos padres que nos han exigido mucho de pequeños, hemos desarrollado una autoestima condicionada a los resultados que conseguimos. Es decir, nos valoramos en función de lo que hacemos y lo que logramos.
Este tipo de autoestima tiene algunos problemas:
- Para sentirte bien tienes que estar logrando nuevos objetivos continuamente y demostrándote sin descanso lo bueno que eres. Nunca estás satisfecho
- En ocasiones, el que nuestros resultados sean buenos o malos dependen de otras personas, como por ejemplo nuestro jefe. Por eso, hay veces que hacemos cosas que realmente no queremos hacer sólo para ganarnos la aprobación de otros
- Como estás acostumbrado a que todo te salga bien, si un día fallas en algo te hundes completamente
(Si quieres ver un ejemplo verídico de todo esto, te recomiendo que leas este post)
Cuando Teoma dice que “hasta que no te liberes de la aprobación de unos y de otros y te dediques a la realización de ilusiones nada te llenará», se está refiriendo a que para sentirnos verdaderamente satisfechos necesitamos abandonar esa autoestima orientada a resultados.
¿Y cuál es la alternativa? La alternativa es aceptarnos tal y como somos (aunque siempre intentemos mejorar) y querernos de manera incondicional a pesar de nuestros defectos y nuestros errores, como nos quiere nuestra madre, como quieres a tus hijos, o como quieres a tu mejor amigo. Llegar a la conclusión de a la que llegó Virginia, que «valgo por lo que soy y no por lo que hago», y hacer las cosas simplemente porque nos gustan y queremos hacerlas, y no para demostrarle nada a nadie.
Eres lo que haces… y mucho más
La gente te valorará exclusivamente por tus acciones, ya que es lo único que pueden ver de ti. No tienen poderes adivinatorios ni pueden leerte el pensamiento, así que por mucho que tú en tu cabeza quieras con locura a otra persona, si en vez de decírselo y demostrárselo te portas como un cabrón (aunque sea con tu mejor intención), te considerará un cabrón.
Esto es lógico y normal, pero tú no tienes por qué valorarte a ti mismo de la misma manera. Tú sabes que eres lo que haces y lo que piensas (y mucho más). Tu identidad es la suma de múltiples partes y está en tu mano el aceptarlas todas y cada una de ellas.
Deja de demostrarle a unos y a otros lo guay que eres. Si eliges ese camino siempre te sentirás vacío, ya que vivir buscando la aprobación de los demás es como intentar llenar un pozo sin fondo. En vez de eso, haz lo que verdaderamente deseas. Que tu motivación nazca del entusiasmo y no de la frustración ni de la necesidad de conseguir logros que realmente no te interesan sólo para impresionar a los demás. Eres lo que eres y, si alguien no lo acepta o comparte, no tienes por qué cambiar para contentarlo.
Desarrolla una autoestima incondicional y aprende a quererte por ser quien eres
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Toda mi vida he tenido una autoestima orientada a resultados y he sido un firme creyente del “no eres lo que dices, sino lo que haces.” En su taller Quiérete de Verdad, Miguel Guzmán me enseñó otras creencias más sanas y me ayudó a unir muchas piezas que hasta entonces habían estado sueltas. Más concretamente, me hizo entender que es normal que la relación con los demás sea condicional pero que de cara a nosotros mismos es más útil el querernos incondicionalmente. Me gustaría aprovechar estas líneas para darle las gracias por su trabajo y por inspirarme a escribir este post.
Tengo el placer de conocer a Virginia en persona y es una tía estupenda a la que yo también admiro mucho. Virginia, te deseo mucha suerte con esta etapa que estás atravesando, aunque estoy completamente seguro de que saldrás adelante 🙂
La foto es en Alleppey, al sur de la India. En un barco conocí a un niño Indio y le dije que nos echásemos una foto poniendo los dos cara fea, pero como ves no me hizo mucho caso. El que en la foto esté haciendo el tonto no quiere decir que sea tonto 😉
Enhorabuena por el post Ángel. Hace poco he conocido tu blog y me encanta. Me quedo con : «vivir buscando la aprobación de los demás es como intentar llenar un pozo sin fondo» . Un saludo
Buenas Angel…
Sigo tu blog desde hace poco, lo encontré por casualidad y me suscribí.
Siempre tengo mucho lío, a veces no tengo tiempo para leerlo entero. Pero este último, me ha enganchado de la primera palabra a la última. Si tengo que definirlo, diría que es absolutamente brillante!
Virginia, mucho ánimo, creo ver entre tus palabras inteligencia emocional. Es cuestión de tiempo que fluya.
Abrazos,
J
muy buen tema,espero ser el primero, saludos desde monterrey,mexico ojale que en tu aventura viajer consideres venir a monterrey, estamos a 2 hrs de la frontera norte con los estados unidos ( por si extrañas los e.u.a jaja )
saludos
Mil gracias por este post Angel!!!
Del bache ya he salido (hasta que llegue uno nuevo por supuesto), fortalecida. No podía ser de otro modo. Yo tambien soy exigente a más no poder, orientada a resultados y en muchas ocasiones me ha funcionado pero en el momento actual que estoy desterrando creencias erroneas no me sirve. He tenido que nadar en lo más óscuro de mi persona y descubrir cosas que no me gustaban para saberlo, reconocerlo y luego aceptarlo. Ha sido bastante duro porque una tiene la sensación de renacer y de sentirse frágil ( y es paradójico cuando soy madre de dos maestros de 6 y 7 años y ellos me ven con superpoderes…). Pero renanciendo se ve todo con nuevos ojos, desde otra perspectiva. Puro cambio en un mundual…Un abrazo fuerte y gracias de nuevo por tus palabras. Vir
Buenos días, Ángel
Te leo desde hace un tiempo y hoy comento por primera vez.
Es fundamental que lo que hagas te represente, es decir, que lo que verdaderamente eres se corresponda con toda aquello que dices, piensas y haces… de ahí la dificultad y, por qué no, la felicidad.
Esa valoración de la que hablas de la gente que no conoces, son los primeros prejuicios (sin connotaciones). El cerebro no soporta el vacío y rápidamente elaboramos un perfil de quien tenemos delante (quizá por pura protección) lo que nos ayuda a ver si esa persona se corresponde o no con nuestros ‘intereses’.
Gracias por el post, por hacernos parar y pensar en cosas que a menudo se nos escapan.
Un saludo,
Gemma Villegas
Se echaban de menos posts con más chicha o más «profundos».
Otra coincidencia más, mis padres siempre han sido muy exigentes y reconozco que durante mucho tiempo he buscado su aprobación. De hecho nunca he sido problematico ni rebelde. Con el tiempo mi personalidad se ha ido haciendo más marcada y las discrepancias se han acrecentado. Pero aún así como tú dices, a pesar de las equivocaciones, siempre están ahí para apoyarte cuando te caes.
Lo del reconocimiento en el terreno laboral es un tema espinoso. Yo siempre cuento la experiencia que tuve en los EEUU. Mismo trabajo, cambio de jefe y pasé de estar con una puerta en la calle a ser uno de los más valorados y que me subieran el sueldo. Por que? Hablé claro y fui siempre sincero. Esa misma característica no me es valorada actualmente donde trabajo, pero aunque estoy aprendiendo a no cambiar simplemente moderando ciertos aspectos de cara a la galería.
Siempre diré que uno no puede agradar a todo el mundo. Y no todo el mundo tiene la misma imagen de ti. La gente que me conoce poco dice que puedo parecer frío y distante como buen castellano. Sin embargo los amigos que me conocen mucho dicen que es todo lo contrario. Que soy afectuoso y saben que pueden contar conmigo para lo que necesiten. Por supuesto me importa más lo que puedan opinar los que me conocen de hace más tiempo 🙂
Ten cuidado, puede ser que te engañen para no hacerte sentirte mal. Lo mas importante es que tu analices lo que haces y sientas que estas bien.
Gracias a ti Ángel!
Fue un placer tenerte en el taller y me alegra ver que te gustó y que este tipo de creencias ahora forman también parte de tu filosofía.
Es cierto que vivimos en una sociedad en la que se valora, sobre todo, lo que haces. Esto no tendría por qué ser así, pero en esta sociedad y de momento, lo es.
El problema viene cuando internalizamos esa creencia hacia nosotros mismos, y nos queremos a nosotros mismos en función de que las cosas nos salgan bien o nos salgan mal. La Autoestima Condicionada a Resultados como bien has explicado tiene una serie de características que nos pueden llevar a la infelicidad, especialmente el estar constantemente buscando fuera aquello que deberíamos ser capaces de encontrar dentro.
A lo largo de nuestra vida, eso nos lleva a una búsqueda constante de validación personal en el exterior, por ejemplo a base de hacer muchas cosas (“No soy capaz de ser feliz sin hacer nada”) y nos deja una permanente sensación de insatisfacción. Además cuando cometemos errores, nuestro cerebro los amplifica y los rumia, mortificándonos porque las cosas no nos han salido como deberían.
Yo he estado hasta los 35 años pensando que era lo que hacía, y llevo 2 que me quiero a mí mismo incondicionalmente 😉 y después de haber estado mucho tiempo en cada una de esas dos mentalidades, puedo decir que no hay ni punto de comparación: puede que queriéndote en base a tus éxitos te espolees más, pero queriéndote independientemente de tus acciones, eres inmensamente más feliz.
Un abrazote Ángel!
Creo tocayo que deberías pagarle afiliados a Angel porque creo que no hay mejor publicidad de un curso como esta!
Hasta a mi, que siempre he ido resolviendo mis diatribas personales con amigos e internamente me ha entrado curiosidad.
Por cierto tu blog y los posts que mandas via email son muy interesantes. Me quedo sobre todo con la idea de que los miedos no son malos per se, sino un mecanismo de defensa.
Hola Miguel, ¡lo bueno abunda! 😀
Lo primero de todo, te agradezco muchísimo tus palabras, sé que no me prodigo en mi blog, porque lo hago a tiempo parcial, pero intento que lo que publique sea de muy alta calidad, y cuando leo que le gusta a la gente, me alegra mucho y me motiva a seguir publicando.
Lo segundo, (creo que Ángel no tendrá problema en que sea transparente con esto), Ángel y yo somos afiliados mutualmente. Nos conocemos desde hace muchos años y conocemos bien el trabajo del otro, lo cual hace mucho más fácil el recomendarlo. Y creo que ninguno de los dos iba a arriesgar su propio prestigio recomendando algo cutre, descuidado o que no funcionase. Y al revés cuando tienes material y productos de calidad, es muy interesante recomendar otros profesionales de alta calidad que de alguna manera complementen lo que tú trabajas, en otras áreas o desde otras perspectivas.
Lo tercero, me ha parecido muy interesante tu observación sobre el miedo. Efectivamente el miedo es una señal que te esta diciendo: «Cuidado!» «Precaución!» «Aquí hay peligro!».
El problema es cuando te asocias («te quedas atrapado») en el pensamiento del miedo. Como una ansiedad. Porque la asociación al miedo paraliza, y entonces dejas de actuar. Además es una reacción biológica, la primera defensa de un animal cuando un depredador va a cazarlo es ¡hacerse el muerto! Es decir, paralizarse.
Pero si eres capaz de entender el miedo como una advertencia, puede ser extremadamente útil. En este acercamiento te recomiendo el libro «The Gift of Fear» (en español traducido como «El Valor del Miedo») de Gavin de Becker:
ESP –>
ENG –>
Un abrazote!
La confusión quizá esta en la frase » Valgo por lo que soy » creo que tendría que ser «valgo por como soy. »
La muestra la tenemos en los políticos, no creo que haya profesión en la que se quieran más a si mismo. Ellos no admiten que se les juzgue por lo que hacen, solo por lo que son. Deben estar en lo cierto, pues cada cuatro años vuelven a salir. Jajaja
Esto es un ejemplo real, que quizá pueda clarificar un poco.
Hace un par de años conocí a una chica que pasaba por una situación similar a la de Virginia.
Esta chica había nacido en una familia de médicos, algo natural para esa familia, fue que cuando ella llego a la Universidad, se matriculara en Medicina.
Paso el tiempo, termino su carrera y se puso a trabajar en una clínica, es cuando yo la conocí, pues bien un día hablando con ella, la vi muy decaída, le pregunte que le pasaba y me dijo, que había estudiado medicina por inercia, que trabajaba todos los días por lo mismo y que seguía viviendo en la casa familiar, que no veía salida a su vida gris.
Hablamos de la afición que nos unía, que no es otra que la acuarofilia, me dijo que desde muy pequeña era lo único que le llenaba, sobre todo la parte de plantados, que ella era feliz, cuando se dedicaba a sus plantas acuáticas, midiendo los macros y micros nutrientes, abonando, midiendo co2, haciendo podas, diseños etc.
Pues viendo que en cuanto le tocabas el tema, resplandecía su cara y de lo gris pasaba a la felicidad, le comente que en Ebay, una tienda salía por 15 euros al mes.
Hoy en día, es una mujer feliz, vive sola, bueno, con un montón de acuarios, dejo la clínica y en el 2013 ha tenido miles de pedidos.
P.D. Ahora es la loca de su familia y la única concesión que me dijo que hace, es que de vez en cuando, cuando le preguntan a que se dedica, suele decir que es medico, para no tener que decir que cría plantas acuáticas, ya que la miran con cara rara.
Por eso creo que el disfrutar con lo que haces, sea lo que sea y si puedes vivir de ello, mejor, es la manera de tener menos episodios grises en tú vida.
P.D. Con respecto a Ángel, y al ejemplo que puse de él, lo creo al cien por cien, creo que tuvo una decisión poco común y por eso es un valor añadido a lo que hace y a como es. No todos estamos tan » locos » o somos tan valientes de hacer cosas como estas.
Lo de locos lo digo porque alguien del cual no me acuerdo, dijo que existe una especie de locura, que es perder todo, menos la razón.
De este tema hablaba yo el otro día con un amigo. Ya que para mi familia y allegados parece que he ido marcha atrás, porque he decidido no centrarme tanto en lo que hago, sino en como eso que hago me puede ayudar a crecer o desarrollar ciertos aspectos de mi que creo necesitan un empujoncillo.
Por la regla de tres de eres lo que haces, yo debía de ser mucho más cuando era maquilladora, trabajando para grandes firmas y codeándome con famosos, o también debí ser mucho más cuando era azafata de vuelo, rodeada por mi tripulación mientras paseábamos con nuestros uniformes y trolleys por los aeropuertos. Pero…¿cómo es que yo me siento ahora mucho más grande trabajando en una pequeña tienda, donde la mayoría de mis clientes son prostitutas, travestis y transexuales? ¿Y cómo puede ser posible que me haya crecido aun más, ya si cabe, al decidir dejarlo e irme a poner cafés o fregar escaleras a otro país?
Para atrás irán los cangrejos, porque lo que es yo jamás me sentí tan embalada hacia adelante como ahora. En el preciso momento que dejé de intentar cumplir las expectativas de los demás, en ese justo instante, es cuando ya nunca más va a importar lo que haces, ni vas a necesitar demostrar lo que eres. Porqué yo soy yo, siendo la reina del pollo frito, ¡o sirviendo pollo frito!
Me gustó el croquis!XDD
Chu!
Impecable presentacion con sustanciosos comentarios añadidos.
Hoy solo tengo piropos para todos…
Iba a decir que no tengo ni una coma que añadir, pero voy a añadir una….
:))
Todo eso que eres y que expresas haciendo, tiene un valor especial si aporta cosas buenas a la sociedad ademas de a ti mismo…Asi de simple y de bucolico jajajajaja
Teoma….Te echaba de menos ;)) Ya sabes que me encanta leerte
Virginia…Me gusta mucho tu blog… Animo!!
Miguel Guzman… En cuanto pueda me encantaria hacer ese curso. Mil gracias por tu generosidad, ya me dijo Nandy (mi novio) que le habias hecho propaganda en tu blog :))
Miguel (alma gemela de Angel): Me encanta leerte…Con tanto siempre que aportar…Yo no te percibo nada frio…
Caro….Locaaaaaaaaaaa….Tu eres SUPER ,hagas lo que hagas y estes donde estes!!
Besos a todos
Hola mujer de los bosques.
Me alegra también mucho el verte por aquí, eres una mujer que emanas mucha alegría y eso hoy en día es algo difícil de ver.
Es verdad que ahora comento menos, pero sigo observando los problemas existenciales de nuestra sociedad de la opulencia, aunque sigo pensando » homo homini lupus.» Jajaja.
Un saludo muy bucólico, Jajaja.
Nos conocemos?, no es posible… seguro que no.
Lo mismo te digo Teoma.
Ultimamente estoy más de espectadora que otra cosa… ;))
un beso
Mis padres no me han exigido nada durante mi infancia es mas me han frenado,antes de estar en la cuna ya corría, quería hacer algo no podía…… y yo bueno no se puede no se puede .La autoestima la fui perdiendo a medida que iba creciendo lo que quería hacer se iba desvaneciendo.Hace unos años cuando toque lo que una persona no debe de pisar nunca que es estar mas a bajo del fondo decidí cambiar de ciudad ,hacer nuevos amigos y estudiar lo que un día quise.
Estoy estudiando animación y actividades físico deportivas (increíble eh…)Soy tímida cuando me siento a disgusto en un sitio , las clases se me hacían un mundo pero cuando estaba en las practicas y estoy los niños me devoraban y quieren estar conmigo ,los profesores me desvaloran y me miran diciendo que ara esta aquí …..pero todo eso desvanece cuando estoy de voluntaria en eventos deportivos para discapacitados o cualquier otra actividad.
No espero reconocimiento ninguno aprendí de pequeña a no tenerlos y si algunas vez me dan las gracias o me lo reconocen me siento hasta incomoda por que pienso que lo dicen por decir aunque una palmadita en la espalda nunca viene mal.
Puede que me desvaríe del tema del post,(posiblemente) algunas veces juzgamos a las personas por una acción que hizo en un momento ,somos lo que hacemos pero a veces alguna extraña razón saltamos desquiciados alterados o,,,,, alguna cosa y por ese mismo preciso momento te juzgaron de por vida…..como dice el refrán por un perro que mate…..el fin y al cavo hay que hacer lo que uno se sienta cómodo y el mundo lo vera conforme el se sienta.
pd:me gustaría ir algunas de tus charlas M.G
como dice la canción a cuna patata aprende a ser feliz(aunque lo diga una k nació sin autoestima )
No podemos vivir cara a la galería, ni mucho menos estar pendiente de las aprobaciones de los demás para vivir la propia vida. Ya sé vivimos en comunidad y todas estas cosas. No, la vida es demasiado corta para perder el tiempo con memeses, o algo parecido.
Virginia vive con intensidad, no te quedes engachada a nada ni a nadie. Cualquier cosa que pase por tu vida quedate con lo mejor, y lo no menos mejor hacermos un gran y enorme filtro para seguir caminando con ilusión y con los brazos abiertos a nuevas enseñanzas.
Los demás no hacen tu vida, la vida la haces tú con tus pensamientos y razonamientos, hay que vivir desde el corazón pero acompañada de la cabeza, hay que vivir en armonía reforzando todos nuestros cuerpos, el físiso, el mental, el espiritual… no es posbible dejar uno aparcado porque si lo hacemos nos fallara algo y no podremos continurar, siempre tendremos ese mal sabor de boca que no nos permite disfrutar la vida como lo que es un maravilloso regalo. Todo, absolutamente todo puede ser bello o una enseñanza, de nosotros depende cómo lo vemos, cómo lo interpretamos y que salida queremos darle.
Disfrutemos de todas las experiencias que nos va poniendo la vida, y aprendendamos de las cosas que menos nos agrada para sacarle el jugo verdadero. VIVIR LA VIDA CON PLENITUD.
Acuerdate de la ley de la impermanencia, aquello que dice: ESTO TAMBIEN PASARA.
Besos desde mi bosque de una inconformista de la vida que siempre ha realizado lo que le ha parecido oportuno, con y sin aprobación.
Os dejo un link con mi refugio secreto, por favor, es secreto…
Hola Angel.
Me encantó el post!
Admiro tu valentía de estar por esos mundos de Dios de descubierta y que tus experiencias te inspiren como para escribir cosas tan buenas como este ùltimo post.
La pregunta es ¿Me puedo querer por lo que soy o además tengo que hacer y bien…? ¿Me basta con quererme como soy o me quiero en función de lo que logro?.
Me horroriza pensar en el anuncio de Loreal me quiero… «porque yo lo valgo», pero creo que define bien ese amor propio incondicional del que hablas, el que nos chirria muchas veces a la hora de permitirnos ser felices.
Es dificil, a todos nos han puesto etiquetas y algunas que otras nos han gustado demasiado, aún así, nos pesan e incluso muchas veces, nos cuestan la salud.
Tener un autoconcepto positivo influye en el rendimiento, condiciona nuestras decisiones, los resultados que esperamos de ellas y contribuye al equilibrio vital y de la propia salud.
Conozco a Migue y también tengo ganas de ir a su curso!!
Un abrazo,
María
Increíble.
Este post me ha encantado, en serio, todo lo que dices es la realidad y lo expresas de tal forma que nos haces identificarnos con tus palabras.
Somos un reflejo de lo que hacemos, es decir, las personas nos valoran por nuestros hechos, a la vez de que lo que hacemos es una expresión de lo que somos. Pero aparte una persona también se fija mucho en el físico y le atraerá estar con una persona de buen aspecto o guapo/a que al contrario.
A veces pienso en un ejemplo adecuadamente con lo que expones en este tema (por cierto, no tengo nada en contra de ellos) en relación con los deportistas; la gente los valora por lo que hacen, es decir, no hay que negar la evidencia de lo que hacen con respecto a lo que son. Vamos a tomar la persona de Iniesta: hace poco hubo un anuncio de Iniesta como dependiente de una tienda de móviles y, como era de esperar, toda la gente se paraba sorprendida para verle o tomar un beneficio propio como echarle una foto; imagínense qué sería de Iniesta si su profesión hubiese sido otra bien distinta a ser futbolista, ¿alguien lo conocería por lo que hiciera? ¿alguien valoraría su trabajo? ¿sentirían admiración por él? NO. Lo cierto es que le valoran por lo que hace: ser uno de los mejores futbolistas.
En autoestima me siento identificado con lo que dijiste en «Como estás acostumbrado a que todo te salga bien, si un día fallas en algo te hundes completamente». Me recuerda a mi primer año en el instituto cuando estaba acostumbrado a sacar notazas y suspendí un examen; fue algo duro 🙂 Y lo mismo me siento identificado con «Deja de demostrarle a unos y a otros lo guay que eres. Si eliges ese camino siempre te sentirás vacío, ya que vivir buscando la aprobación de los demás es como intentar llenar un pozo sin fondo. En vez de eso, haz lo que verdaderamente deseas. Que tu motivación nazca del entusiasmo y no de la frustración ni de la necesidad de conseguir logros que realmente no te interesan sólo para impresionar a los demás.» Es algo que me persiguió durante mucho tiempo, pero realmente importa lo que deseas hacer y te sentirás mejor.
Por cierto Ángel, últimamente haces post para contestar a comentarios de otros artículos. Algo que me agrada y me parece correcto, jeje.
Ah, se me olvidaba, me alegro por Virginia y espero que siga el camino correcto 🙂
Hola a todos:
¿Virginia cual es tu blog?para visitarlo, parecemos una pequeña familia…
Me han encantado todos los comentarios, hoy en mi trabajo en el instituto, me ha pasado algo para lo que este post me viene genial:
Doy clases en los ciclos formativos a grado superior, y dedico muchas horas a preparar las clases, para hacerlas amenas y cercanas, hoy en una reunión de departamento hemos estado expresando cada uno por donde vamos y como nos va, cuando ha llegado mi turno, le he dicho que llevar una empresa simulada (proyecto a través de internet) me esta costando mucho porque es mucho lío y me hace perder mucho tiempo, y no veo que sea ameno para los alumnos ni para mi, con lo que sinceramente prefiero dedicar dar horas a mis clases, pues llevar esa empresa simulada esta supeditada a un dinero que nos dan al instituto, y una compañera me ha dicho que perderíamos el dinero y yo le he dicho que yo no lo hago por el dinero, y no veas el mal rollo que ha dado esto.
Lo mejor de todo es que a mi me da igual, yo lo he intentado, he comprobado que es un coñazo,y que no quiero hacerlo, pero me veo obligada por el dinero, entonces me he acordado de que el año que viene no voy a estar en el instituto (mi año sabático)y me he sentido genial…..
Hay una frase que me ha seguido muchos años de mi vida y que voy a cumplir
«Que es la vida si por vivirla no te queda tiempo para pararte y respirar»
Salud
Pues si como una pequeña gran familia. Mi blog es http://www.km0personal.com, un blog que nació a raiz de una crisis laboral porque necesitaba compartir lo que estaba aprendiendo de todo lo que leía y experimentaba. En estos dos años he sufrido no uno sino varios km0, el último hace bien poco…Bsos. Vir
gracias a todos por vuestros ánimos. Es curioso pero llegan cuando ya estoy más fuerte y centrada, cuando ya no los necesito para estar bien (señal de que ya estoy muchísimo mejor). Mil gracias por vuestras palabras. Seguiremos compartiendo y avanzando. Un abrazo. Vir
Hola Virginia me siento muy identificada contigo , me pasare por tu blog a leerlo. Os dejo mi canción del día dice mucho sin decir nada:)
Buenas Ángel
Felicidades por mostrarnos a través de tus experiencias lo que muchos pensamos pero no se suele decir en voz alta. De corazón y creo que en nombre de casi todos los que te leemos … Gracias
Hola Ángel, un artículo impresionante.
Me ha gustado mucho la explicación de los círculos de interés y el concepto de autoestima orientada a resultados. Como seres sociales sin embargo, las personas también medimos mucho nuestra valía en función de lo que piensan los demás de nosotros. Creo que es inevitable que eso ocurra: si todo el mundo me dice que soy estúpido (si lo piensan no sirve porque podría no enterarme toda la vida) difícilmente me creeré que soy un genio.
Lo ideal es encontrar un equilibrio, saber que las personas opinan de nosotros desde su perspectiva y sin entender nuestras motivaciones y necesidades, y que por lo tanto su opinión puede estar sesgada. De esa forma podemos lograr que no nos afecte tanto lo que digan los demás.
Dejar de querernos en función de resultados es complicado pero factible; querernos de forma incondicional sin depender de opiniones externas es prácticamente imposible. La clave está en encontrar la forma de darle a todo la importancia justa.
Por cierto, tu artículo también ha servido para que Miguel Guzmán se gane otro seguidor 🙂
¡Un abrazo!
Muy buenas Pau!
Muchas gracias por tu comentario, me alegra que te guste lo que escribo.
Entras un poco en detalle en la mecánica de la Autoestima Incondicional, así que te respondo también en detalle:
Dices primero: «si todo el mundo me dice que soy estúpido (si lo piensan no sirve porque podría no enterarme toda la vida) difícilmente me creeré que soy un genio.»
Y esto lo enlazas con «querernos de forma incondicional sin depender de opiniones externas es prácticamente imposible»
Obviamente yo no estoy de acuerdo con esta última frase – porque tengo un taller que va de descubrir cómo hacer eso precisamente, entonces qué voy a decir 😛 … pero me gustaría entrar en lo que yo considero que es la distorsión de la Autoestima Condicional:
¡No necesitas ser un puñetero genio para quererte a ti mismo!
Lo primero de todo, “ser estúpido” o “ser un genio” son etiquetas, la gente (o tú mismo) te etiqueta con esto si haces algo que ellos (o tú mismo) consideran estúpido. Por ejemplo, suspendes varios exámenes y te dice tu padre, o un profesor, “es que eres estúpido”. Quizás puedas hacer algo diferente para aprobar esos exámenes, como dedicar más tiempo a estudiar, aplicar técnicas de estudio más eficientes, buscar ayuda externa como un profesor particular o una academia, o cambiarte a una carrera que verdaderamente te apasione.
¿Qué sucede si alguna de tus cualidades, como la inteligencia, la destreza o la fuerza, no está al nivel que tú esperas? Pues para empezar, puedes optar por practicarla y mejorar. Hasta el mismo coeficiente intelectual se puede mejorar con la práctica. Otra opción es aceptar esa limitación y dedicarte a otra cosa. Por ejemplo si veo que me cuesta mucho trabajo tocar la guitarra, puedo practicar más para compensar, si de verdad me apasiona, o dedicarme a otro área totalmente diferente como la informática o el snowboard.
Pero cuando haces este proceso mental: “como no soy todo lo inteligente que debería, entonces no me puedo querer a mí mismo”, entonces te estás poniendo a ti mismo una zancadilla hacia la infelicidad. Siempre va a haber alguien más listo que tú, más guapo que tú… hasta el campeón del mundo en algo, lo es durante un tiempo, y luego viene otro y le destrona.
De ahí que en muchos casos la autoestima condicionada le indica a nuestro cerebro que debemos estar todo el rato comparándonos con los demás, porque siempre nos estamos preguntando: “¿cuándo seré lo suficientemente bueno?”
Mientras bases tu autoestima en la posesión de ciertas cualidades o en la consecución de ciertos resultados, efectivamente te será imposible quererte incondicionalmente.
Por cierto Pau, ¡no sabía que eras el de habilidadsocial.com!
Seguramente te suene mi antigua web, yo soy Lobo Feroz de http://www.exitosocial.com, que también estaba dedicada al desarrollo de las habilidades sociales. No sé si te sonará mi nick pero llevo una década en el mundillo de las habilidades sociales, desde 2004 donde escribía en ASF (fastseduction.com, el grupo original creado por Ross Jeffries en usenet, y luego foro web de donde salieron Gunwitch, Juggler, Mystery, Style y todos estos).
Ahora mismo la tengo parada porque estoy totalmente volcado en el desarrollo personal, sobre todo porque comprendí que es mucho más importante dirigir la mirada hacia el interior: muchas veces el mundo de la seducción esconde grandes problemas internos, como por ejemplo la autoestima condicionada a resultados.
«Es mejor el que más liga» y creencias similares son el pan nuestro de cada día en ese mundillo, así como que el hecho de no ligar les cause a los «sargeros» una increíble frustración. Si no eres feliz si no ligas, entonces ligar deja de ser una forma de comunicar y relacionarte, y se convierte en una adicción para tapar problemas de autoestima.
En un futuro cuando mi emprendimiento en este área ya este solidificada, me gustaría retomar el tema de las habilidades sociales, desde un punto de vista mucho más sano que el mero «aprende técnicas para ligar», que eso ya no resuena en lo más mínimo con mi filosofía. Me gustaría estar en contacto contigo.
Un abrazote!
Hola Miguel, claro que me suena tu nick, el mundo es muy pequeño 😉
Estoy totalmente de acuerdo con lo que dices. La seducción es el paradigma de la autoestima condicionada a resultados y además poca gente pone a prueba los dogmas reales que se predican, con lo que a menudo se perpetuan creencias erróneas.
Es mucho más importante seducirte primero a ti mismo, para poder seducir luego a los demás. Hacerlo al revés tan sólo supone un parche temporal en tu autoestima. De hecho la semana pasada publiqué un post entero sobre este tema tan controvertido.
Ese mismo paso que comentas que te gustaría dar en un futuro es en el que estoy metido desde hace relativamente poco. Apenas hay nada en español sobre la ciencia/arte de las habilidades sociales desde un punto de vista práctico y que no esté centrado únicamente en seducción o a probemas de aprendizaje en niños pequeños. Vamos a mantenernos en contacto para futuras colaboraciones 🙂
¡Un abrazo grande y encantado de hablar contigo!
Como todo lo que leído me parece correcto darle el punto musical al asunto canción del día.
https://www.youtube.com/watch?v=sLG3r1A3GX8
Hacer siempre lo que este en vuestra mano sin imaginar que pueda volar.
La realidad es que es un fiel reflejo de la sociedad actual.
Yo cambiaría lo de Alcohol>>>> Amoxicilina, por Amoxicilina>>>>> Alcohol.
Lo digo por reducir el Alcohol, para que quede alguna Neurona viva y aumentar la Amoxicilina, para que mate las bacterias de la mediocridad.
Totalmente de acuerdo en todo. Pero según mi experiencia, dejar de ser por lo que haces tiene un precio alto que pagar sobre todo por parte de la familia. Porque están acostumbrados a determinadas formas de actuar que en la mayoría de los casos estaban orientadas a satisfacerles y perder eso no le gusta a nadie. Así que el que quiera hacer este gran cambio que esté preparado para cierta soledad. Si resiste en esa soledad descubrirá cosas grandes.
Me encantan las reflexiones que generan los buenos comentarios. Creo que eso enriquece mucho un blog y este definitivamente lo enriquece un montón la participación de la gente. Y te confieso que a veces me entero más de lo que dices con los comentarios jajaja (soy algo rara).
Sobre el post pues la verdad yo soy una afortunada, creo que nací con estrella a pesar de venir de una familia tan humilde y de carecer de tantas cosas. Sin embargo, pienso que eso es lo que hace que hoy sea así: descomplicada, despreocupada, feliz, positiva, alegre, emprendedora, soñadora, ahorradora… Una persona que vive la vida a su manera, que es feliz con poco y sobre todo que sabe vivir el aquí y el ahora.
Si mi vida de juventud hubiese sido de otra manera, tal vez no sería así, por eso creo que a la final los padres y la familia influyen mucho en uno y cambiar ese equipaje es una de las tareas más complicadas y difíciles de la vida…
Un abrazo 🙂
Hola Ángel:
Ayer, leyendo tu post sobre los 10 pasos para llevar una vida convencional me emocioné tanto al encontrar algunos paralelismos con un escrito mío que perdí totalmente la educación. Para justificarme diré, siguiendo el consejo de Pau para relacionarse con desconocidos, que estaba nerviosa. No siempre somos lo que hacemos, pero cuando en lo que hacemos ponemos lo que somos, surgen todos esos miedos e inseguridades del «qué imagen dará esto de mí».
Sólo quería darte las gracias y revelar mi existencia como otra de esas personas que te leen, que te entienden y que hasta cierto punto te necesitan; al menos hasta que abandonemos el nido y volemos por nuestra cuenta… Darte la enhorabuena por ser fiel a ti mismo y a lo que crees, y por ser lo suficientemente generoso como para compartirlo.
Para mí, también, has sido un maravilloso descubrimiento.
Por eso pienso compartirte con todo el que pueda y, cuanto mejor me caiga una persona, más insistiré en que te lea.
Un abrazo desde Asturias.
Hola Ángel
Te sigo hace poco y me suelen gustar tus posts. Lo que menos me gusta es cuando dices a alguien que es analfabeto por no saber inglés. Es fácil decirlo cuando tu padre es profesor de inglés y has tenido la suerte de recibir esas clases durante años. Pero muchos de nosotros no tenemos grandes oportunidades que no justifico que no sepas inglés ya que hay muchas formas de aprenderlo. Yo hasta ahora no me había puesto en serio pero en absoluto me siento una analfabeta. Me he sacado mi carrera universitaria que lo mio me costó porque siempre he tenido que pagármelo todo. Lo que quiero decirte es que deberías de ponerte en el lugar de muchas personas que no tienen los recursos económicos que has tenido tu.
Aún así me parece muy interesante lo que cuentas y por eso te sigo y te seguiré.
Un saludo