«¿Dónde queda la familia cuando haces lo que haces?» me preguntaba un lector del blog hace poco. «¿Tienes en cuenta a la gente que te rodea cuando tomas decisiones?».
Cuando les dije a mis padres que iba a dejar mi trabajo para irme a viajar por el mundo, no se lo tomaron demasiado bien. Me dijeron que estaba loco, que no sabía lo que hacía y que en España no había futuro. Yo les intenté explicar que iba a crear un negocio online que pudiese gestionar desde cualquier país, pero por muchos ejemplos que les ponía de personas que ya lo habían conseguido, ellos siempre encontraban algún motivo por el cual yo no iba a poder hacer lo mismo.
Es difícil llevarle la contraria a alguien que te quiere y que te lo ha dado todo. El problema es que a veces esas personas especiales te quieren tanto que se oponen a que vivas tu propia vida.
En situaciones como esta, es prácticamente imposible convencerles sólo con palabras de que te apoyen. Cada persona tiene su propia visión del mundo y no la va a cambiar así como así. Yo comprendí que si mi familia no me entiende, mi única opción era liderar con el ejemplo. Y esa es tu única opción también si quieres que consigan comprenderte.
Sólo cuando te vean feliz haciendo lo que de verdad quieres hacer empezarán a plantearse que a lo mejor eso que les parecía una locura no era tan mala idea.
No puedes ignorar tus sueños eternamente. Si algo es importante para ti, debes hacerlo. No cometas el error de sacrificarte para intentar complacer a tus padres o a tu novia, porque si lo haces todos perderéis: tú serás infeliz, tus padres tendrán un hijo infeliz, tu novia tendrá una pareja infeliz y puede que un futuro formes parte tu propia familia infeliz.
Nunca creas que vivir mejor es callarse muchas veces, aceptar lo que otros te digan y seguir el camino establecido. Si sigues tu propio camino, al final los demás acabarán aceptándolo. Puede que te vean como el raro o como la oveja negra, pero te respetarán por tener el valor de tomar tus propias decisiones y, quién sabe, quizá hasta se unan a tu causa =)
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Foto: Maret Hosemann
Hoy llego a Shanghai después de pasar unos días en las terrazas de arroz de Longsheng. Todo el mundo me ha hablado fenomenal de esa ciudad, así que tengo muchísimas ganas de conocerla.
La sobreprotección paternal es un muro bastante alto que saltar. Aun recuerdo cuando le dije a mi madre por primera vez, con 18 años, que me iba a vivir a Madrid. Como con todo lo que se salía de sus esquemas, trató de evitarlo a toda costa, con el argumento de que cometía un error: después, pasó a tácticas disuasorias más amables y «engolosinantes».
Diez años después, y tras la repetición continuada de dicho episodio, ha acabado por acostumbrarse y aceptarlo, hasta el punto de que me da la sensación de que espera el día que le vuelva a decir: «Madre, siéntate que tenemos que hablar…» (Y yo se que ese día está llegando)
Realmente, si pudiera, volvería a sus esquemas anteriores, pero se ha resignado a tener un hijo un poco oveja negra.Y está muy feliz y orgullosa con ello!
Y como bien dices….no tomar las riendas de tu vida y tus propias decisiones por no llevar la contraria, no desilusionar o no enfadar a alguien es un tremendo error y un gran paso hacia la infelicidad. Para ambos.
a menudo, los padres olvidan que los hijos son personas libres, que los elijen a ellos para que durante un tiempo, el necesario, les abran puertas, les mostren caminos. Pero luego, inevitablemente, como personas que son, los hijos deben vivir sus vidas, equivocarse y aprender de sus errores. Es dificil dejar de proteger y de dar seguridad a quien has dado todo, creo que es el gran aprendizaje pendiente por parte de muchos padres que intentan por supuesto hacerlo lo mejor posible, aunque se equivoquen, aunque como hijos pensemos que pudieran haberlo hecho mejor. Muchas veces lo mejor es callarse, llevar el proyecto en silencio o lo mas discretamente que podamos, y una vez que todo esté lanzado, contarlo. No se trata de convencerles de que es lo que queremos, lo que necesitamos. Se trata como tu dices de hacerlo y de demostrar con el ejemplo de que es verdaderamente lo que nos hace felices. y viendonos felices aunque en el fondo algo de tristeza les invada, tarde o temprano y por sus propios medios lo entenderán. En parte, está en nosotros el desarrollar nuestro poder personal sabiendo decir no, confiando en que el camino elegido es el adecuado.
Y lo dice alguien que con 18 años se fue de casa, y hoy siendo madre, tiene por supuesto mucho, mucho que aprender….
Estoy de acuerdo, mis papas no me dejan hacer algo sola, hasta instalaron un programa en todos mis dispositivos para monitorear todo lo que hago.
Siento que no tengo privacidad para nada, y cuando les reclamo me dicen que es por mi bien. Cuál bien si lo único que quiero es vivir la vida sin que nadie me diga que hacer.
Qué bueno es este post y a cuántas cosas me recuerda 😉 Suscribo 100% lo que dice Ángel, luego cuando haces lo que tienes que hacer, los demás dejan de clasificarlo como «malo» y te ponen como «ejemplo».
Me encanta la sencillez y la sabiduría con que te expresas . Feliz semana !!
Yo creo que es muy, muy difícil no hacer caso a los padres, sobre todo en asuntos como el laboral, que da mucho miedo. Seguimos teniendo en mente que la experiencia es un grado y nos cuesta llevarles la contraria. Pero olvidamos que ellos están opinando con datos antiguos sobre un mundo que tiene reglas nuevas, y que les falta información para emitir un juicio adecuado. Creo que es importantísimo tener esto en mente al tomar según qué decisiones.
También creo que cierta separación emocional de la familia es muy importante para descubrir quién eres y escoger tu propio camino. Existe cierto «corporativismo familiar», como lo definió uno de mis pacientes, que muchas veces nos lleva a forzar los límites de las relaciones y a ejercer y tolerar comportamientos abusivos, por aquello de que «la familia es la familia». Yo últimamente intento desarrollar una política de «no te voy a tolerar lo que no le toleraría a cualquier amigo», y no me va mal.
Las relaciones familiares pueden y deben trabajarse, «educarse» y evolucionar.
Besitos, guapete.
Imposible no hacer caso a los padres. Al menos hasta ahora.
Yo trabajaba en el equipo de cámara de una productora haciendo series para televisión. A mis padres no les parecía suficiente, así que en cuanto acabé el contrato me metí en la universidad. Después de tres años en una universidad privada a ver quien se atreve a dejárselo y menos cuando sigo viviendo con mis padres. Ugh. Solo queda un año, que lo acabaré por orgullo. Este año me lo pasaré preparándome, como tu 2012, para ser libre.
Saludos, muchachos!
Que malo es darse cuenta de esto a posteriori, cuando se postergan las decisiones hasta que es demasiado tarde. Cuantas consecuencias indeseables. Y como bien dices, cuantas cosas quedan para el arrepentimiento.
Muchas gracias y enhorabuena por tu blog.
Hola:
Es cierto que la familia en su exceso de cariño es el primero oponente. Pienso que a veces tienen razón y nos evitan una mala decisión.
Hace poco me invitaron a ser parte de un negocio multinivel del señor Bill Farley y Deepak Chopra. De entrada me emocionó formar parte de ese negocio. Mi esposo estaba presente cuando me plantearon de qué se trataba. De entrada las ganancias son asombrosas. Mi esposo se opuso de una a que emprendiera en eso. ¿Razones? Me dijo que no era lo mismo realizar una inversión considerable para nuestros bolsillos en algo que no hay posibilidad de control (la empresa tiene su dueño, yo sería algo así como consumidor – distribuidor), para mantener el estatus debía continuar reclutando y finalmente, me dijo: – Apelo a tu sentido común. No tomes una decisión ahora con la emoción. Aprovecha tus talentos y habilidades para analizar muy bien si es una opción correcta. En todo caso, pienso que ese dinero que piensas invertir allí te serviría mejor que lo invirtieras en un negocio propio online de los muchos que me has comentado ultimamente. Si pierdes dinero, será por intentar construir algo tuyo, no sumarle al de otra persona.
Me quede pensando. Me dije: ¿Es posible que la emoción del momento me nubló la mente? Así que decidí investigar más a fondo sobre la empresa que me hacía la propuesta, como funcionaba el esquema de comisiones, analicé la red que debía crear vs mis habilidades. Finalmente, le sumé el factor principios. Al final me dí cuenta que no es lo que yo deseo. Ese negocio podría ser muy bueno pero no para mí y lo que tengo como objetivo.
Tener un negocio propio es tener control de él, tanto de los éxitos como de los fracasos. En esa propuesta no tenía esa opción y dependía eternamente de «cautivar» personas para que se unieran a mí.
Este caso es el 10% de las situaciones con mi familia, porque en muchas otras decisiones, me fue mejor dando rienda a suelta a lo que deseaba hacer en su momento.
De nuevo mil gracias, Angel. Tu blog me ha dado muchas perspectivas ni que decir de tus amigos bloggers.
Saludos,
Maryory Alexandra Valdés
Cali – Colombia
De verdad Angel, creo que estos post se deberían estudiar de manera obligatoria en el instituto. Antes cuando estaba deprimido me emborrachaba, ahora te leo y es como si tomase la poción mágica de Asterix y Obelix, me siento invulnerable.
Muchas gracias.
Tal cual.
Mis padres no me creen todavía que «no pienso regresar a una oficina» y siguen diciéndome cosas como «lo que haces es útil para tu CV y cuando pidas trabajo en algo grande te servirá». Por ahora prefiero no llevar la contraria, sobre todo porque voy comenzando y todavía no puedo decirles «vean lo muy exitosa que soy» jaja. Pero pasará y tendrán que aceptarlo.
Al menos no me obligan a nada, supongo que al vivir tan lejos no les queda más que resignarse, ni saben bien a bien qué hago. Todavía.
Muy interesante tu entrada.
Hola,
que felicidad al encontrar esta página.
Angel, dices las cosas que pasan por nuestras cabezas cuando quieres cambiar algo o que necesitas saber que es lo que quieres de la vida en general que hasta lo haces parecer fácil de explicar.
Es muy difícil decirle a nuestros familiares que quieres irte ( en mi caso a otro país ) porque donde estas ya no quieres eso para el resto de tu vida.
Soy divorciada y estoy en este proceso ahora. En unos meses me voy a ver una ciudad en San Sebastian en España que tengo amigos a ver como es todo por ahí y con todas las ganas de instalarme ahi.
Gracias a todos por sus comentarios y me quedo muy contenta de haberlos encontrado!!
Mucha suerte a todos!!
Hola Angel!!
Coincido con los comentarios de las otras personas, hace un mes aproximadamente encontré tu blog (no sé si por causalidad o causalidad), lo cierto es que desde entonces te leo diariamente, y esto me ha ayudado inmensamente a descubrir a qué quiero dedicar el resto de mi vida, y eso vale más que cualquier cosa. Gracias a tí y todos tus amigos blogueros que también los sigo ya que comparten mi misma filosofía de vida.
Un abrazo gigante, y muchas gracias por poner el marcha este proyecto que nos ayuda bastante.
Saludos
Primero felicitarte por tu blog pues esta ayudando a muchas personas a tomar las riendas de su vida. (Me declaro tu fan xd) Lo descubrì un día mientras usaba yeso debido a un accidente y desde entonces, me ha cambiado la vida.
Como bien mencionas, es difícil llevar la contraria de familia pues muchos factores juegan en contra como el sentir que los has decepcionado, el riesgo de equivocarte pues se supone que «ellos saben« debido a su experiencia y asì…
Como bien dice mi papà, las personas tenemos 2 formas de aprender: de experiencias que nos cuentan y experiencias vividas. En mi familia me inculcaron aprender siempre de la primera forma para intentar evitar malos ratos y el sufrimiento. Sin embargo, siempre creo que es mucho màs enriquecedor APRENDER DE TUS PROPIOS ERRORES.
Pese a equivocarse, de cada experiencia te llevas algo aprendido. Como leí mas arriba, yo también fui partìcipe alguna vez de esos «negocios multinivel«. Tiempo después me di cuenta que aunque ese tipo de negocios no eran para mi, me enseñò que no siempre tienes que trabajar para otros.
Sigue adelante y una vez màs, gracias por inspirar al mundo.
Saludos desde Perù. 🙂
Tal cual. Lo hacen bajo su paradigma que les ha sido útil y creen que es lo mejor para tí. Y te dan los consejo prácticos que les han servido.
Pero nadie mejor que tú sabe que es lo mejor para tí, así que escúchales pero haz lo que tú quieras. Y asume las consecuencias, las malas y las buenas también.
Ellos siempre estarán ahí, hagas lo que hagas.